La Secretaría de la Contraloría del Estado (Secoes) llamará a comparecer a los ex funcionarios involucrados en dos de los programas distintivos de la administración de Roberto Borge Angulo, como fueron Entrega de Mochilas Escolares y Basura por Alimentos, ya que se presume existió desvío de recursos públicos.
En el caso de las mochilas escolares, Rosario Ortiz Yeladaqui y Víctor Viveros Salazar, quienes fungieron como Oficial Mayor en el gobierno pasado, tendrán que explicar la compra de artículos chinos de hule que fueron entregados en 2014 y 2015 a hijos de los burócratas estatales con una inversión millonaria.
Rafael del Pozo Dergal, secretario de este organismo, dio a conocer que “hay una auditoria, se tienen documentos en los que se destaca que hubo un contrato para la adquisición de miles de mochilas en la última parte del gobierno anterior, pero que nunca fueron entregadas, esa es la información preliminar”.
Recalcó que se tiene el último contrato, pero no las evidencias de la entrega de las mochilas y que esta observación el análisis de adquisiciones 2016, que no existe cumplimiento del contrato.
“En el caso de las mochilas, se tiene que llamar a los que intervinieron en el proceso de adquisición, para cuestionarlos del por qué no hay evidencia del cumplimiento y en caso de que no se cumpla, sancionar a los exfuncionarios públicos”, afirmó.
Se sabe que la Secoes investiga la adquisición de más de 20 mil paquetes de útiles escolares presuntamente entregados a los hijos de los burócratas estatales en los periodos 2014,2015 y 2016 por un monto de 10 millones de pesos.
La investigación arrojó que por cada mochila con útiles se pagó casi 800 pesos, cuando por el material y la calidad de las libretas y lo que se entregó no rebasan ni los 150 pesos.
¿Y EL DINERO?
Con relación al programa Basura por Alimentos, Del Pozo Dergal afirmó que al ser uno de los programas emblemáticos de la pasada administración se tiene que auditar.
“Se tiene que auditar, por lo que implica en gasto, era el programa en donde más recursos se destinaban al estado y no se tiene conocimiento en qué fue utilizado el dinero de la basura que se reciclaba e incluso tampoco se tienen registros de que los residuos se reciclaran”, comentó.
Julián Ricalde Magaña, Secretario de Desarrollo Social e Indígena (Sedari), dio a conocer en su momento esta observación, ya que la basura se entregaba al relleno sanitario del Ayuntamiento de Benito Juárez, lo que significa que existía un costo y cae en irregularidades, quedando como un programa de carácter mediático. (Renán Moguel/Quintana Roo Hoy)