Cientos de seguidores, amigos y familiares del rapero DMX, muerto el pasado 9 de abril tras sufrir un infarto, acudieron este fin de semana en Nueva York a dos actos de despedida celebrados en un centro de conciertos en una iglesia antes de que recibiera sepultura.
Este domingo, sus familiares y las personas más cercanas le dieron su último adiós en una ceremonia religiosa en una iglesia del barrio neoyorquino de Brooklyn, que no estuvo abierta al público, pero que sí se retransmitió en directo.
El servicio religioso se organizó un día después de que el centro de conciertos Barclays Center acogiera un acto multitudinario en el que participaron cantantes, amigos, fans y familiares para recordar al cantante, que desarrolló su carrera musical en los años 90 y principios de los 2000, época en la que vendió millones de copias de sus 5 primeros discos, que debutaron en el número 1 del Billboard, un récord para ese tiempo.
Su féretro, rodeado de moteros del grupo “Ruff Ryders“, fue transportado en un enorme vehículo tipo “pick up” con las ruedas gigantes, en el que se podía leer “larga vida a DMX”.
En la entrada del Barclays Center se había colocado para la ocasión una fotografía en blanco y negro del rapero con unas alas de ángel y una cita suya que rezaba: “Todos nosotros tenemos una estrella, todo lo que tienes que hacer es encontrarla. Cuando lo consigas, todo el mundo que la vea quedará cegado”.