Cancún. A Tras la denuncia presentada por la Auditoria superior de la Federación en contra de la Universidad Politécnica de Quintana Roo (Upqroo) a cargo del rector Raúl Arístides Pérez Aguilar, por el presunto desvío de recursos y malos manejos administrativos por 100 millones de pesos, el Secretario de la Contraloría del Estado, Rafael del Pozo Dergal, indicó que hasta el momento, no han encontrado evidencia de que los servicios se prestaron.
El funcionario comentó que están los documentos, pagos, transferencias y contratos, pero no hay evidencia que se llevó a cabo la prestación del servicio.
Del Pozo Dergal, indicó que realizaron una auditoria a los proveedores que prestaron el servicio a la universidad “Derivado de esa auditoría presentamos una denuncia ante la Fiscalía General del Estado, que es lo que corresponde”, añadió.
El Contralor del estado, afirmó que la dependencia a su cargo, no ha sido omisa en ninguna de las responsabilidades que tiene respecto a este caso y que están vigentes.
De acuerdo a la Auditoría Superior de la Federación, en el caso de la Upqroo, hay irregularidades por 97.2 millones de pesos, por la supuesta contratación de personal y adquisición de insumos para labores de formación de profesionistas.
Estas irregularidades fueron detectadas tras la revisión de los ejercicios fiscales 2015 y 2016, que motivaron las denuncias penales. Esta situación podría repercutir directamente en la participación de la universidad para acceder a recursos federales.
José Luis Pech Galera, artífice de la EM, capítulo Quintana Roo
Desde su llegada a la Universidad Politécnica de Quintana Roo (Upqroo) en 2013, como resultado de una negociación de José Luis Pech Várguez con el entonces gobernador Roberto Borge Angulo, José Luis Pech Galera (presuntamente) operó diversos fraudes relacionados con la denominada “Estafa Maestra” encabezada por la entonces secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Verlanga.
La operación del fraude fue muy vistosa en su momento con la compra de numerosos vehículos de lujo, entre los que destacaron SUVs de la marca Mazda, hasta un autobús, todo operado por el entonces rector, José Luis Pech Galera. Con base en trabajos de investigación periodística se ha documentado que, desde la llegada de Pech Galera se registró un despilfarro de los recursos con múltiples viajes al interior del país y al extranjero.
PECH VÁRGUEZ ‘PINTA SU RAYITA’
A decir del propio senador, quien ha sido cuestionado en diversas ocasiones por las acusaciones que pesan sobre su hijo, que él se deslinda de cualquier responsabilidad que pese sobre su vástago, sin embargo, resulta fundamental refrescarle la memoria al senador en torno de la negociación que él personalmente sostuvo con el exgobernador y hoy presidiario Roberto Borge Angulo para que su hijo llegara a la Rectoría, este hecho, lo convierte en cómplice, pues el nombramiento trasgredió las leyes internas de la Universidad y trascendió como un acto de corrupción por tráfico de influencias.
Por Connie López y Redacción/Grupo Cantón