JESÚS VÁZQUEZ
GRUPO CANTÓN

CANCÚN.- Un episodio de captura y posterior liberación de policías estatales se vivió en Cancún, con Alberto Capella Ibarra, titular de Seguridad Pública estatal como el principal protagonista al ordenar la liberación de los implicados sin que mediase la investigación correspondiente.

Todo inició con la detención de dos elementos de la Policía Estatal, quienes tenían en su poder bolsas, celulares y dinero, obtenido en un asalto que se registró al mediodía de ayer en un taller de mofles en la Región 100.

Los policías involucrados en el atraco fueron identificados con los nombres, Armando C. L., de 36 años y Eduardo A. C., de 33 años de edad, cada uno tenía una pistola y pertenecen al área de inteligencia del Secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo, Alberto Capella Ibarra.

Las primeras versiones indican que los elementos de la Policía Estatal participaron en el asalto en complicidad con otros sujetos de los que se supone también son policías, en una situación que fue grabada por una cámara de vigilancia en el interior del taller de mofles y las imágenes se difundieron en redes sociales.

El robo con violencia fue reportado al 911 alrededor de las 11:30 horas del martes, en la calle 34, manzana 31 de la Región 100. Las investigaciones revelaron que los hechos ocurrieron en un taller de mofles, en donde cuatro delincuentes llegaron en un automóvil, tipo Jetta, de color blanco y tres de ellos descendieron y entraron a las oficinas. En el interior había ocho personas, entre estas cuatro mujeres.

Los asaltantes se apoderaron de teléfonos celulares y de las carteras de las mujeres, así como de 97 mil pesos en efectivo y de un vehículo, tipo Sentra, color verde, placas HEZ636A. Tres de los asaltantes volvieron a subirse al Jetta. En el vehículo Sentra se subió uno de los delincuentes, que después abandonó el vehículo cual chocó contra una camioneta momentos después, en la avenida 127, manzana 111, Región 100.

Así como no contaban que sus fechorías eran grabadas, tampoco sospecharon que uno de los agraviados detectó su celular robado, mediante el sistema de rastreo GPS, en un domicilio de la Región 216, en la Manzana 11, lote 10, entre las calles Maui y Cozumel. Hasta ahí fue la policía municipal y en el interior estaban los mencionados policías junto con las pertenencias de las víctimas del robo. Con estas evidencias se dio parte a la Fiscalía General del Estado (FGE), que dirige Oscar Montes de Oca, para que intervinieran los peritos.

Durante la intervención de las autoridades, uno de los agraviados reconoció que en el lugar se encontraban dos de los presuntos asaltantes, quienes fueron identificados por las víctimas porque se toparon con ellos de frente en el momento del asalto y porque fueron objeto de golpes y agresiones verbales. Los asaltantes resultaron ser elementos de la Policía Estatal y tenían a su cargo una camioneta oficial, marca Nissan, de color blanco.

Trascendió que, al momento de las diligencias para la puesta a disposición de los dos elementos ante el Ministerio Público, un mando de la Policía Estatal, conocido con la clave Apolo, exigió a los policías municipales que soltaran a sus compañeros pero no le hicieron caso y fueron detenidos en los separos.

Como ironía, el martes pasado, en redes sociales, el secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo, Alberto Capella, subió un video para presumir la preparación de los elementos de la Policía Estatal. Sin embargo, este jueves, Capella Ibarra manifestó su inconformidad y defendió a los dos elementos vinculados al asalto del taller de mofles.

El secretario de Seguridad Pública, Alberto Capella Ibarra, dijo que todo se trató de una fricción “estúpida” entre elementos preventivos y de investigación, ya “que en la soberbia de la secrecía (sic) de datos que manejan no se identificaron y generaron el conflicto”. No dijo nada del video en los que se aprecia la violencia de los policías hacia las víctimas en el momento del asalto.

A pesar de que las víctimas identificaron a sus verdugos, de los videos y del botín en su poder, Capella Ibarra expuso sus policías no son los culpables. Aseguró que sus patrullas estaban lejos de los hechos, sin tomar en cuenta que fueron en un jetta blanco a realizar el asalto a mano armada.

El ministerio público de manera expedita, sin siquiera molestarse en tomar en cuenta las evidencias, liberó a los policías, ante el asombro y miedo de las víctimas, porque dijo que como no había flagrancia no podía mantenerlos bajo arresto.

Los videos, los teléfono y parte del botín, no sirvieron como elementos de prueba. Más tarde la familia de los afectados, denunció ante los medios de comunicación que fueron amenazados de muerte por los mismos policías asaltantes y se mantienen en completa zozobra por temor de lo que pueda pasarles a ellos o a sus familias. Hay que recordar que Montes de Oca, titular de la FGR, también ha sido señalado de actos de corrupción y que apenas hace unos días dio de baja a todos ministeriales que lo señalaban.

Alberto Capella desde hace dos años que llegó para hacerse cargo de la seguridad en el estado, se ha visto envuelto en varios escándalos y señalamientos.

Mientras en la calle siguen balaceras, ejecuciones, violaciones, lenocinio y robos a mano armada, él se ha dedicado a entrevistar a los artistas y buscar entrevistas en programas de la farándula. Con su llegada también se han incrementado los rafagueos a viviendas y negocios, las quemas de vehículos de las personas que no quieren pagar derecho de piso, las que no ceden a extorsiones o las que mantienen una deuda con los prestamistas de la organización conocida como “La Gota”.