Las personas con trabajos independientes e informales, fueron quienes más se vieron afectados por la crisis económica.
La suspensión de muchas actividades laborales en México, por motivo de la pandemia de COVID-19, produjo consecuencias devastadoras para muchos. En algunos casos, se dieron gran cantidad de despidos y en otros, se bajó el sueldo de los trabajadores. Muchas industrias tuvieron que adaptarse al “home office” y tomar medidas de emergencia para tratar de sufrir menos la crisis económica y no desaparecer en el proceso. Esto afectó el salario de los mexicanos, según detalla el reporte “México y la crisis de la COVID-19 en el mundo del trabajo: respuestas y desafíos”, realizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Las circunstancias actuales hicieron que aumentara el número de personas que trabajan sin recibir sueldo, así como la cantidad de quienes reciben el salario mínimo. Los números fueron variando entre abril y agosto; en mayo, 6% de los trabajadores no recibían paga, en abril, se redujo el número al 2%, pero en agosto aumento hasta el 7%.
Así mismo, comparando el año anterior, la OIT reveló que el número de quienes cobraban el salario mínimo, que creció recientemente a $123.22 pesos diarios, se hizo mayor. Del 20% del 2019, llegó al 25% de la población con trabajo. Mientras tanto, quienes ganan dos salarios mínimos, crecieron de 32% a 35%. Así mismo, quienes recibían hasta tres salarios mínimos, fueron menos, siendo en mayo del 2019, 17%, en abril de 2020, 15% y en mayo hasta el 12%.