CIUDAD DE MÉXICO.
Dado que actualmente existen muchas alternativas para pedir un préstamo personal en línea, resulta fundamental conocer qué medidas debes tomar en cuenta para proteger tu información.
La escasa cultura financiera y las estrategias cada vez más sofisticadas por parte de estafadores, representan un riesgo latente para millones de mexicanos quienes, sin saberlo, pueden revelar o compartir información sensible.
“El primer paso es asegurarse de que estás tratando con una plataforma confiable. Esto lo puedes validar revisando su página de internet, utilizando sus medios de atención oficiales y buscando referencias o comentarios en Google y Facebook”, expresó Chávez.
Otra precaución es verificar que la página es segura, sobre todo al momento de ingresar tus datos personales. se sugiere revisar que en la barra de navegación aparezca el ícono de un candado que, en teoría, garantiza la seguridad del sitio.
“También hay que ser cuidadoso al pedir informes. Si lo haces desde Facebook, cerciórate de que sea el perfil oficial de la empresa y jamás escribas información personal como tu número de celular o correo electrónico en las publicaciones que pueden ver todas las personas”, destacó.
El directivo dijo que algunas personas comparten información personal en Facebook para ser contactadas, lo que abre la posibilidad de que un estafador se comunique directamente con ellas, haciéndose pasar por un ejecutivo o representante de la empresa.
“En ese momento, el estafador suele utilizar un discurso muy estructurado para que su potencial víctima le deposite cierta cantidad de dinero con el objetivo de agilizar el trámite. Por increíble que parezca, muchas personas siguen cayendo en esta trampa”, alertó.
Finalmente, se sugiere ser cauteloso con la información que solicita la empresa ya que, si bien es cierto que es necesario compartir datos y documentación personal, también es verdad que bajo ninguna circunstancia deberán revelarse claves, nips o accesos de tarjetas o cuentas bancarias.
Una responsabilidad compartida
La seguridad de la información es una responsabilidad compartida entre las empresas y sus usuarios.
“Las empresas tienen la responsabilidad de contar con los mejores y más actualizados protocolos en materia de ciberseguridad, eso es un hecho. Asimismo, es su obligación tener estrictas políticas de confidencialidad que garanticen la seguridad de la información”, dijo.
“Sin embargo, también es responsabilidad del usuario hacer uso del sentido común, ya que ninguna medida tecnológica, por muy avanzada que sea, será suficientemente efectiva si el usuario, por desconocimiento o flojera, comparte su información sin ninguna precaución”, señaló.
Para evitar ser víctima de estafadores, se sugiere atender las recomendaciones emitidas por autoridades como la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Fuente: Excelsior