Hoy en día tener una página web resulta vital para una empresa (sin importar su tamaño), emprendimiento, startup o inclusive, para personas autónomas. La razón fundamental de esta afirmación es que estamos entrando en la cuarta revolución industrial donde prácticamente todas las actividades se están involucrando con la digitalización.
Esto implica que para crecer, necesitamos hacer presencia en internet cada vez más y tener una página web nos permite no solo presentar nuestros productos / servicios, sino también atraer clientes potenciales y fidelizarlos. Un hecho a destacar es que en México, más del 50 % de la población realizan frecuentemente compras por internet. Veamos a continuación como puedes crear un sitio web desde cero de manera fácil y rápida.
Antes de sumergirte en la creación de la página web, lo primero que debes hacer es definir cuál va a ser tu mercado objetivo y como llegar a ese público. Tienes que analizar de manera muy sincera el tipo de negocio que vas a iniciar y luego establecer diferentes planes para atraer clientes potenciales. No olvides definir también las metas que esperas lograr a corto, mediano y largo plazo.
Una vez que hayas definido los objetivos y metas, puedes embarcarte ahora sí en la creación y diseño de tu sitio web. El primer paso es el nombre de dominio de tu página y obviamente, contar con un hospedaje web. No cometas el error de elegir un nombre aleatorio sin relación directa con tu negocio, pues esto te traerá muchos problemas en el mediano – largo plazo.
El nombre del dominio debe estar relacionado directamente con lo que pretendes ofrecer en internet y no debe pasar de 8 – 10 caracteres. A su vez, tampoco es recomendable agregar guiones o números, pues muchos clientes potenciales no sabrán cómo escribirlo correctamente en un motor de búsqueda. Por ejemplo, no es lo mismo abogados.com que aboga2.com.
En cuanto a la extensión, el más usado es el .com y .net, aunque en los últimos años el dominio xyz ha crecido en popularidad y de hecho, sus creadores han indicado que será el remplazo del .com en un futuro. Con relación al hosting, si bien existen muchos gratuitos, lo mejor es optar por uno de pago, ya que estos son mucho más confiables, seguros y disponen de soporte técnico.
Si bien puedes codificar tu página desde cero o contratar los servicios de algunos desarrolladores para tal fin, actualmente la opción más recomendable es implementar un sistema de gestión de contenidos (CMS). Con estos gestores de contenidos, podrás crear tu sitio web de manera rápida, segura y confiable y no será necesario que tengas conocimientos en programación.
Al día de hoy existen numerosos CMS tanto gratuitos como de pago. Sin embargo, WordPress es el de mayor demanda (aproximadamente el 40 % de los sitios webs a nivel mundial son gestionados con WordPress) dado que es Open Source y gratuito. Además, posee una gran cantidad de temas o plantillas prediseñadas para que realices los retoques a tu gusto. Aunque para ser justos, muchos de sus temas están muy bien elaborados, por lo que muchas veces no requiere de muchos retoques.
Una vez que tu página web tenga nombre (dominio), esté hospeda y funcionando, es el momento de generar contenidos. Los contenidos son una pieza clave para el éxito de tu página web, pues será “el anzuelo” para cautivar y fidelizar clientes potenciales. Por ello, debes generar contenidos de acuerdo al público que piensas atraer, hablar como esa audiencia y que este público se sienta familiarizado al consumir tus contenidos.
Ten muy en cuenta que debes acompañar tus contenidos con imágenes atractivas, pues de este modo conseguirás muchas más conversiones. Otro punto a destacar es que estas imágenes deben tener buena calidad para causar el mayor impacto posible en el público objetivo. Obviamente, no va a ser la misma experiencia cuando una persona haga clic sobre una imagen y esta sea borrosa o tenga mucho pixelado.
Si vas a utilizar imágenes provistas por algún buscador, procura que estas no estén sujetas a derechos de autor. También es recomendable que realices alguna edición en la misma a fin de que si dicha imagen está siendo ya utilizada por otras páginas, la tuya marque la diferencia y no sea tomada como una imagen referencial sacada a los apuros.
Cuando ya tu página tenga contenidos suficientes para mostrar, el siguiente paso será ampliar su visibilidad a fin de maximizar las probabilidades de captar clientes potenciales. Para ello tenemos que recurrir a las redes sociales, las cuales han pasado de ser simples plataformas de ocio a herramientas muy importantes para el marketing digital.
Ten muy en cuenta que debes analizar primero las plataformas sociales que tengas a la vista, pues cada una de ellas tienen diferentes audiencias.