Jannette Leon / Grupo Cantón
Quintana Roo,-El mariachi, reconocido por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, continúa siendo un referente de la identidad mexicana en todo el mundo. Así lo expresó Juan Carlos Mazza Santana, músico profesional con cuatro décadas de carrera y heredero de una tradición familiar que se remonta a más de 120 años, cuando su bisabuelo, Simón Santana, fundó en Autlán, Jalisco, el histórico Mariachi Santana.
“Hablando particularmente de lo mío, con el mariachi llevo 32 años ininterrumpidos”, afirmó Mazza, quien destacó que el género no solo se escucha en escenarios internacionales, sino también en momentos íntimos y comunitarios.
“El mariachi no es solamente música, es historia y sentimiento”, agregó, convencido de que cada interpretación conecta con la memoria y las emociones colectivas.
En la entrevista, el músico recordó también el Récord Guinness obtenido en 2024 en el Zócalo de la Ciudad de México, donde 1 200 intérpretes tocaron al unísono El Son de la Negra, consolidando al mariachi como la agrupación más grande del mundo.
“El año pasado le quitamos el Récord Guinness a Jalisco, el mariachi más grande del mundo que toca al unísono…”, relató con orgullo.
Mazza Santana compartió además una de las teorías más difundidas sobre el origen del término mariachi, que lo relaciona con la palabra francesa mariage (boda), debido a la fuerte presencia de estos músicos en celebraciones nupciales.
Más allá de debates etimológicos, subrayó que el mariachi ha logrado consolidarse como un emblema cultural capaz de trascender fronteras y épocas.
El músico señaló que la enseñanza del mariachi comienza desde edades tempranas y que cada vez más jóvenes se interesan en aprender los instrumentos tradicionales, lo que garantiza la continuidad del género.
También reconoció que enfrentan desafíos como la falta de apoyos económicos y la necesidad de mayor difusión en espacios culturales, aunque confía en que la pasión del público mantiene vivo este legado.
“Donde suena el mariachi, siempre hay alegría y orgullo mexicano”, concluyó, convencido de que esta tradición seguirá resonando como símbolo de unión familiar y social en el país y más allá de sus fronteras.