Jocelyn Díaz / Grupo Cantón
Cultura.- Entre carcajadas y aplausos, el Teatro 8 de octubre fue testigo de una despedida llena de emoción: Cocowash bajó el telón tras su última función de temporada, dejando en la memoria colectiva a los entrañables personajes que hicieron de esta obra una de las propuestas más divertidas, frescas y arriesgadas del teatro local.
El público disfrutó por última vez de Ramira y Margarita, de Borachio, Pichirilo, Idomeneo y Leonato, Alena y Don Juan, Troilo y Benedicto, Edgardo Maruviela, Petarda y Hero, Anodina y el Fraile, la doctora Manríquez, Andandolfa y Beatriz, Gomorro y Claudio, así como de Venablo Puriñongo y Don Pedro. Con humor, irreverencia y humanidad, cada uno de ellos logró conquistar corazones a lo largo de la temporada.
La historia nos condujo de la mano de la doctora Manríquez, una eminente psiquiatra que presentó ante el público un desbordado experimento psicológico en el que, junto a su asistente Pichirilo y el joven director Maruviela, convirtió a la audiencia en cómplice de un juego teatral. Inspirados en la comedia shakespereana Mucho ruido y pocas nueces, estos “ciudadanos comunes y corrientes” recordaron que la realidad también puede ser ficción y visceversa.
Con esta última función, Cocowash se despide de los escenarios, pero no del corazón del público cancunense que acompañó más de un domingo a nuestra gran Compañía Municipal de Teatro.
El elenco conformado por Regina Escalera, Scarlett Arias, Jacobo Hernández, Mariath Pons, Erick Ripoll, Fernanda De León, César Sierra, Esteban Uscanga, Rosanna Arjona, Braulio Corona y Elsa Becerra, enamoraron al público con cada personaje. A ellos se suman las directoras Mireille Anaya y Cecilia Zolev, quienes de la mano de su creadora Mariana Hartasánchez, lograron tropicalizar y crear la magia de este gran texto.
La producción contó además con el talento de Giselle Sandiel en vestuario, Félix Arroyo en diseño de espacio escénico, Ismael Gimate en multimedia y el valioso equipo técnico del Instituto de la Cultura y las Artes, cuya labor tras bambalinas permitió que Cocowash conquistara al público cancunense desde su estreno.