VERACRUZ.– El calor era intenso, 40 grados. Beatriz abanica a Andrés Manuel López Obrador con un enorme sombrero, mientras el tabasqueño da su discurso. AMLO llegó emocionado a su segunda tierra. Volvió a presumir que es “choco-jarocho” por su padre de Veracruz y su madre de Tabasco.
A los miles de asistentes no les importa estar en medio de esos casi 40 grados de sol quemante. La entrada fue apasionada y tumultuosa. Se desbordó la gente.
En la rebambaramba el productor Epigmenio Ibarra, que grababa ese histórico momento de la llegada de AMLO, fue atropellado por la multitud de reporteros, fotógrafos, camarógrafos, auxiliares de logística y público que quería abrazar a Obrador. Ibarra cayó desplomado de espaldas. Su cabeza chocó contra el piso y la sangre empezó a brotarle.
Obrador se detiene asombrado. Alguien levanta a Epigmenio, que enojado lanza mentadas contra todos. Se cercioran de que esté bien. Sólo el raspón en la parte trasera de la cabeza que le sangra levemente.
La encendida entrada al mitin sigue. Obrador se para a besar a una señora de la tercera edad. Se toma fotos con la chaviza. Le autografía un libro a una señora y a unos muchachos. Besa a una jarocha que le sale al paso. Abraza a un niño que le grita ¡presidente! ¡presidente! No escatima saludos ni abrazos. Para todos hay.
Sube al templete. Hablan los oradores. Uno expresa una frase que cala: “Tuvieron que pasar más de 78 años para que surgiera otro personaje en el país como Lázaro Cárdenas, Madero o Juárez. AMLO será el próximo presidente”, dicen.
Rocío Nahle, candidata al Senado, dice que “este arroz ya está más que cocido”.
Cuitláhuac García, candidato a la gubernatura, vuelve a lanzar acusaciones contra el gobernador Miguel Ángel Yunes,que quiere imponer a su hijo en el gobierno.
La gente aplaude a rabiar. Un grupo de lugareños lleva un enorme pejelagarto elaborado con papel maché y cartón, perfectamente estilizado. Y con el pez se la pasan haciendo bulla en todo el mitin. Beatriz Gutiérrez le toma foto con su celular para documentar ese emotivo momento.
Edy Díaz
ENVIADO ESPECIAL
GRUPO CANTÓN