Cancún.- La niña de tres años, quien recibió una descarga eléctrica en la feria ubicada en el cruce de las avenidas Kabah e Xcaret, resultó ser hija de uno de los trabajadores de esas instalaciones y por este motivo, no hizo mayor escándalo para no perjudicar sus ingresos.
Después del accidente, reportado la noche del miércoles, la menor fue llevada por una ambulancia de la Cruz Roja al Hospital General, pero su madre la retiró del lugar momentos después, porque aparentemente no sufrió una lesión de consideración y no permitió que permaneciera más tiempo en observación.
La Vicefiscalía General del Estado no recibió ninguna denuncia relacionada con este caso, ni tampoco hubo mayor escándalo, como ocurrió en el accidente registrado en el mes de diciembre del 2014, donde un joven se electrocutó en uno de los juegos y sufrió graves secuelas. (Por Antonio Alcocer / Quintana Roo Hoy)