Una familia originaria de Cuba y con nacionalidad estadounidense se encontraba vacacionando en el hotel Barceló de la Riviera Maya, cuando la tarde de ayer mientras se encontraban en el área de albercas el pequeño de 7 años se lanzó desde un tobogán sin supervisión de sus padres.
Cuando se percataron que el niño no estaba en la superficie de la alberca, los padres y autoridades del hotel revisaron la alberca y lo sacaron a la orilla para practicarle primeros auxilios. El niño fue llevado a una clínica, sin embargo, perdió la vida. Este hecho tuvo lugar el día de ayer, pero el hotel ha tratado de manejar el asunto en perfecto hermetismo.