La Organización Mundial de la Salud (OMS) levantó este viernes 5 de mayo la emergencia internacional por la pandemia de COVID-19, que estaba declarada desde el 30 de enero de 2020, ante la notable reducción de casos graves y fallecimientos a nivel global.
La decisión fue anunciada por el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, después de que este jueves se reuniera el comité de emergencia del organismo para analizar la actual situación de la pandemia, que en más de tres años ha afectado al menos a 765 millones de personas y ha causado la muerte de unos 20 millones.
“Con gran esperanza, declaro que el COVID-19 ha terminado como una emergencia sanitaria mundial. Es un momento de celebración, logrado tras el incasable trabajo de millones de sanitarios, de mucha innovación e investigación, de difíciles decisiones tomadas por los gobiernos y de sacrificios que todos hemos tenido que hacer.
“El COVID-19 ha cambiado nuestro mundo, y nos ha cambiado a nosotros. Esa es la manera que debe ser. Si todos volvemos a cómo eran las cosas antes del COVID-19, habremos fallado en aprender nuestras lecciones y le habremos fallado a las generaciones futuras”, escribió el líder de la OMS en Twitter.
Sin embargo, advirtió que ahora el mundo no debe confiarse tras la declaratoria, aunque la pandemia ya no sea motivo de preocupación: “Lo peor que cualquier país podría hacer ahora es usar esta noticia como una razón para bajar la guardia, desmantelar los sistemas que ha construido o enviar el mensaje a su gente de que el COVID no es motivo de preocupación”.