La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) rechazó este jueves la apelación presentada por Boca Juniors, mediante la cual el club argentino pretendía que el organismo le diera por ganada la final de la Copa Libertadores contra River Plate, debido a los incidentes ocurridos en la previa del partido de vuelta.
La Cámara de Apelaciones de la Conmebol dio a conocer este jueves el fallo con el que desestima la solicitud de Boca, al tiempo que reafirma la sanción impuesta por el Tribunal de Disciplina contra River, que deberá afrontar una multa económica de 400.000 dólares y dos partidos sin público a partir de 2019.
La decisión de Conmebol era la esperada, teniendo en cuenta que ambos equipos se encuentran en pleno entrenamiento previo en la ciudad de Madrid, con miras a disputar el partido el próximo domingo en el estadio Santiago Bernabéu.
No obstante, Boca podrá optar por una última instancia de apelación elevando su reclamo al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS, por sus siglas en inglés).
La semana pasada, el presidente del club argentino, Daniel Angelici, había anticipado que recurriría al TAS si la Cámara de Apelaciones de la Conmebol rechazaba su pedido, algo que finalmente ocurrió este jueves.
Por su parte, la dirigencia de River Plate había apelado el cambio de sede, recurso que probablemente también será desestimado por el ente que regula el fútbol sudamericano.
Ambos equipos se ven así en la obligación de jugar la vuelta de la final de la Copa Libertadores lejos de Buenos Aires, tras la agresión por parte de hinchas de River al autobús de Boca Juniors, cuando se dirigía al estadio de su rival el pasado 24 de noviembre.
El pasado martes, Matías Firpo, el simpatizante de River acusado de protagonizar el ataque, fue detenido por la Policía. Hoy se conoció que recibió una sentencia a dos años y cuatro meses de prisión en suspenso en un juicio abreviado, aunque ya fue puesto en libertad.
Cortesía: RT