CIUDAD DE MÉXICO.- No quería llegar al América. Él apuntaba al Santos de Pelé, ese era su deseo. A 50 años de distancia, Carlos Reinoso reveló que sufrió los primeros meses que vivió con los colores azul y crema.
Pero la llegada a Coapa del técnico José Antonio Roca fue el detonante para que el ‘Maestro’ explotara su futbol y aprendiera a amar a las Águilas, conjunto del cual es una de sus máximas leyendas.
“Yo iba a ir a jugar al Santos de Pelé, me iban a comprar, pero de la noche a la mañana aparecieron unos directivos del América, que eran Panchito (Hernández), el señor Carmona y Pedro Portilla en las oficinas del Audax, equipo donde yo jugaba. En esa época en Chile no se podían meter dólares y el señor Carmona llevaba 20 mil dólares en su cinturón. Jamás pensé jugar en América.
“Yo quería salir de Chile a triunfar en el extranjero y se dio lo de México. Mi llegada no fue tirando cohetes. Los primeros meses no se dieron, yo me quería regresar a Chile, hasta que la mamá de mis hijos me dijo: ‘¿Cómo vamos a regresar fracasados?’.
“Jugamos el Torneo México 1970, fuimos un desastre, sí hacía yo goles, y de la noche a la mañana llega el Maestro Roca y ahí cambió mi vida, la vida del América y la historia, cambia todo”, recordó Reinoso con nostalgia en entrevista con RÉCORD con motivo de que, justo hoy, se cumple medio siglo de su llegada a México con el América.
Y es que Roca fue un adelantado para Reinoso, además de que siempre trató a los jugadores con respeto, pero sobre todo, hizo jugar mejor al América, le creó una identidad.
“El Maestro nunca dijo una grosería, era un adelantado tácticamente. Empezamos a jugar diferente, a jugar muy bien. Bajaba Don Emilio Azcárraga y nos decía que quería un equipo espectacular, que prefería perder 5-4 que ganar 1-0 y esos meses fueron clave en la historia del América.
“Hay un partido ante Chivas que cambia el rumbo, principalmente el mío, porque les metemos 5 con el Estadio Azteca lleno (Temporada 1970-1971) y ahí empieza mi romance con América cuando veo el Azteca lleno, sacaron pañuelos blancos, algo que jamás se me va a olvidar. Ahí nace el romance América-Reinoso. Ese día ante Chivas nace mi amor con América y me quedo. El que se quería regresar a los tres, cuatro meses, ya lleva 50 años en México”, indicó Reinoso.
Con información de RÉCORD