Ni un minuto más para Rafael Márquez. Nada. El árbitro no anunció el tiempo de reposición y así, en el tiempo justo de juego, se acabó la carrera del Káiser mexicano. Todo terminó en un empate a cero, entre el Pachuca y Atlas.
Demasiadas ausencias futuras. Rafael Márquez fue el último que se marchó del césped del estadio Hidalgo, por última vez vestido como jugador de la Liga MX y en espera de una prórroga que lo lleve a la Copa del Mundo de Rusia 2018. Antes que él, se fue Keisuke Honda, que anunció su posible salida del Pachuca y a su lado caminaba Óscar Pérez, que también prometió alejarse del futbol en el punto final del actual torneo.
El Atlas encaró el juego con todos los honores, era la despedida de su jugador histórico y el Pachuca enfrentó el juego como si fuera uno más en su recorrido por la Liga MX. Se equivocó el Pachuca porque casi dejó ir el pase a la Liguilla, y con el empate a cero deja su futuro en manos de los Pumas.
Los Zorros acertaron porque, a pesar de que no se jugaba nada, defendió el último juego de su capitán, del defensa central que jugó en el Mónaco, Barcelona, New York Red Bull, León, Hellas Verona, y terminó con el club en el que inició todo: el Atlas.
FUENTE/ ADRENALINA