Por Óscar Rébora / GRUPO CANTÓN
Hablar de justicia ambiental es hablar, también, de justicia social. En Quintana Roo lo entendemos así: cuidar el entorno no es un privilegio, es un derecho que nace del compromiso colectivo por la vida, la salud y la dignidad de nuestras comunidades.
Desde esa visión nació el programa “Recicla por tu Futuro”, una política pública que impulsa la Gobernadora Mara Lezama como parte del Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo. No se trata únicamente de un esquema de canje de materiales reciclables por despensas; es, sobre todo, una estrategia de transformación cultural y de empoderamiento ciudadano que une dos causas que históricamente caminaban separadas: la protección ambiental y la justicia social.
En un contexto donde el cambio climático deja de ser amenaza y se vuelve realidad cotidiana, la educación ambiental adquiere una dimensión urgente. “Recicla por tu Futuro” enseña que cada acción cuenta: que una botella, una lata o un cartón pueden tener un destino distinto al abandono, y que ese pequeño gesto, multiplicado por miles, cambia el rumbo de una ciudad y de un Estado.
Gracias al esfuerzo de más de 11 mil personas registradas y la participación de familias que se han convertido en guardianas del entorno, el programa ha recuperado más de seis toneladas de materiales reciclables en cada jornada, evitando que terminen en tiraderos o en el mar. Pero su verdadero logro no se mide en kilos: se mide en conciencia. Cada despensa entregada representa el reconocimiento a quienes deciden actuar y no quedarse de brazos cruzados.
“Recicla por tu Futuro” refleja el espíritu de un gobierno humanista, ambientalista y de izquierda, que entiende que el bienestar social no puede construirse sin equilibrio ecológico, y que el desarrollo sostenible no será posible si no es con la gente y desde la gente.
Lo que hoy hacemos con el reciclaje es sembrar una nueva forma de entender la relación entre ciudadanía y medio ambiente. Y cuando una madre de familia enseña a sus hijos a separar residuos, cuando una comunidad entera se organiza para limpiar su colonia, lo que ocurre no es solo una campaña: es el nacimiento de una nueva cultura ambiental y solidaria.
El cambio ambiental no se impone: se construye con participación y justicia. Por eso Recicla por tu Futuro encarna el espíritu de este gobierno —uno que entiende que el bienestar social y la sostenibilidad ambiental no son metas distintas, sino partes del mismo compromiso histórico con la gente. En Quintana Roo, cuidar el entorno es una forma de redistribuir el bienestar.