- – ¿Denuncias contra exdirectores?
- – “Partidos y saltimbanquis”
- – ¡Hasta el seis de enero!
Astillero
Julio Hernández López
La propia presidenta Sheinbaum clasificó el tema como un “abrir de
cloaca”, realizado por Octavio Romero Oropeza: el Infonavit y los
inmensos negocios realizados por sus directivos y por las
representaciones del sindicalismo charro y el empresariado siempre
acomodaticio./
Transas y más transas. Miles de millones de pesos. Señalamientos duros
desde la Mañanera, con detalle de casos aberrantes y escandalosos, más
explícitos y concretos que, por ejemplo, lo mencionado en febrero de
2020 por Carlos Martínez Velázquez, director del Infonavit durante
todo el sexenio obradorista, al referirse al contrato de prestación de
servicios de Telra Realty, por cinco mil millones de pesos que esa
firma pretendía bailarse, aunque tuvo que devolver dos mil millones./
La vigorosa difusión de estos casos se produce cuando la actual
administración federal necesita reforzar su discurso a favor de una
reforma en el Infonavit, que sus opositores están impugnando
vivamente. Pero, como en otros casos de estridencia mediática
estratégica, no hay visos de activación real de los mecanismos
judiciales de castigo a los culpables del saqueo y la corrupción./
Ayer mismo, la Presidenta matizó, en la Mañanera: “esta investigación
(…) pues va a derivar en seguir informando lo que se está
encontrando; y las demandas penales, si es necesario, que tengamos que
presentar. Algunas de ellas, como fueron hace tiempo, pues hay que ver
si todavía hay espacio para su denuncia, si no están… pues ya pasó el
tiempo para poderla presentar (…) Vamos a seguir denunciando. Y ahí,
donde haya espacio todavía, denunciar administrativa y penalmente”./
Es decir, ¿no se tocará a exdirectores del Infonavit, como Alejandro
Murat y David Penchyna?, le plantearon a la Presidenta, quien
respondió: “Pero no es un asunto si se van a tocar. Se presentan las
denuncias y lo que se haga (…) Es que ‘este es un asunto político’,
ahora quieren hacerlo político. No, no es político, es un asunto de
defensa del ahorro de los trabajadores”. Y, ante la insistencia con
referencias de nombres y apellidos, añadió Sheinbaum a los
periodistas: “Sí, pero ustedes están poniendo nombres. Entonces, la
mayor corrupción de lo que se mencionó ayer se dio en el último
periodo de Peña y otras que vienen de antes” (https://goo.su/Gz85eK
)./
¿Qué opinan quienes amablemente leen esta columna: habrá denuncias
penales y administrativas contra presuntos responsables de tanta
corrupción en el Infonavit? ¿Se promoverá el desafuero del ahora
senador por Morena, Alejandro Murat, y se actuará judicialmente contra
él, y contra David Penchyna, este también largamente señalado por
actos de corrupción, pero hasta ahora igualmente impune? ¿Quedará todo
en mero escarceo mediático y retórico para “justificar” las reformas a
la ley de tal instituto?/
Ayer, en este espacio, debió consignarse el calificativo de
saltimbanqui para el político que fue director del Infonavit y ahora
es senador morenista. Dado que algún error impidió tal cita, en
compensación puede leerse el texto del gran analista y maestro de
ciencia política, profesor, investigador y articulista Octavio
Rodríguez Araujo, titulado “Partidos y saltimbanquis”, publicado en
febrero de 2011 y en cuyo último párrafo apuntaba, entre otras frases:
“Así están las cosas y no veo que en corto plazo vayan a cambiar.
Vivimos ahora un país de precandidatos más que de partidos, y de
candidatos a cuenta del mejor postor (…) El país no aguanta más este
obsceno intercambio de candidatos entre partidos ni un sistema de
partidos que no ofrecen nada para modificar el rumbo de la nación.”
(https://goo.su/QDQX8s )./