Voces

Gente que deja huella fuera del diamante

Amigos un placer saludarlos una vez más en ¡Quintana Roo Hoy!, y en esta ocasión dedicaré este espacio no al pelotero, ni al mánager, sino a esos personajes que sin ser lo uno ni lo otro, se vuelven parte importante de la historia de un estadio o de un equipo desde las gradas, ya sea por su aliento incondicional a la novena de casa o por alguna actividad de tipo comercial que pudiera desarrollar dentro del inmueble.

Y es que en menos de dos semanas Cancún perdió a dos personas que reunían dichas características, debido a los lamentables fallecimientos de Nicolás Castillo Ceballos y de Leonardo Puerto Vera, con quienes tengo infinidad de anécdotas relacionadas en su gran mayoría con el Beisbol.

En el caso de “Don Nico”, durante aquellos años de los Langosteros era un infaltable a los partidos y de los que solía quedarse a las tertulias beisboleras al terminó de cada partido en la zona conocida como el -Out 27-, a la par de que a raíz de la mudanza de los Tigres a Quintana Roo, siempre adquirió sus -Tigre Pass-, justo por el lado del equipo local; pero no solo compraba el suyo, sino el de su esposa, dos hijas y cinco nietos, además de que desde hace 15 años, me patrocinó mi libro personalizado de -Box Score-.

Pero apenas la familia beisbolera superaba la pérdida del ex Secretario General del Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo”, cuando el domingo por la mañana nos enteramos de la irreparable partida de “Don Leo”, también conocido como el “Rey del Kibi”.

Este inigualable -Pionero de Cancún-, había sido desde 1996 que nacieron los Langosteros, hasta la temporada del 2023 con los Tigres, antes de empezar a mostrar problemas de salud, una pieza medular en el inmueble de la SM 21, debido a que tenía contacto directo no solo con los peloteros por su -don- de gente y su pasión por el -Rey de los Deportes-, sino también por su negocio de quinielas, además de la venta de -kibies- y -sándwiches- hechos por él mismo.

Leo, solía pasearse por la tribuna del Estadio “Sherwin-Williams Beto Ávila”, con su mandil, su gorra, sus nueve papelitos con las posiciones y su pelota de tenis, en la que metía las quinielas que le lanzaba la gente, para que estos a su vez se la devolvieran con el dinero a pagar, además de llegar con su caja de cartón con sus exquisitos -kibies- y -sándwiches- que tenían una gran demanda, sin dejar de lado que también fue casero de varios peloteros y mánagers, como los hermanos Sergio y Albino Contreras ó Roberto “Chapo” Vizcarra por mencionar algunos.

Hoy a los 90 años, “Don Leo” ha salido de este plano terrenal, dejando un enorme vacío en la casa de los Tigres de Quintana Roo, como lo que en su momento ocurrió con el muy singular aficionado Raúl Antonio Aubert de la Parra, mejor conocido como “El Pollo”, siendo ambos gente que dejan huella fuera del diamante; sin más por el momento me despido de ustedes, deseándoles que la ¡Pasen, muy…pero muy bien!.

Publicado por
Javier