COLUMNA GEORGES GOUBERT
Cuidado, los robots están aquí.
El Tiangong es el primer robot humanoide eléctrico del mundo.
Voces.- Desarrollado por el Centro Nacional y Local de Innovación en Robótica, con sede en Beijing, el Tiangong es el primer robot del mundo que acelerará la integración de los robots en la vida humana.
Es un humanoide de tamaño normal que funciona únicamente con energía eléctrica.
El uso del Tiangong como plataforma fundamental avanzará en el desarrollo de la robótica incorporada y la exploración en diversos campos de vanguardia que van desde la mecánica corporal hasta la inteligencia incorporada, dijo a Global Times Xiong Youjun, director general del centro.
La plataforma principal de Tiangong ha sido sometida a pruebas y validaciones exhaustivas, muchas empresas e institutos de investigación pueden utilizarla directamente, lo que reducirá los costos de investigación y desarrollo.
“Tiangong” tiene una velocidad de movimiento promedio de 10 kilómetros por hora y puede moverse suavemente en diversos terrenos como escaleras, pasto, grava y arena.
Algunos representantes de la Universidad de Pekín, la Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong y la Universidad de Jianghan dijeron que creen que el proyecto podría impulsar el desarrollo de la cadena de suministro de la robótica humanoide de China.
Desde su lanzamiento oficial en abril de 2024, Tiangong ya se ha aplicado en múltiples escenarios, incluidas tareas de recogida y almacenamiento en almacenes y patrullas de vigilancia.
Es un motor clave del crecimiento económico. Pero un peligro real para la humanidad, Tiangong, no se equivoca, nunca tiene dolor de cabeza, nunca quedará embarazada ni hará huelga y puede trabajar día y noche durante todo el año. Mientras nosotros,………..
La robótica ligada a la inteligencia artificial es el futuro, es nuestro futuro, pero también es nuestra muerte. Ya no seremos de ninguna utilidad porque son superiores a nosotros en todos los ámbitos, sin tener cambios de humor. Entonces, ¿qué podemos hacer?
No perder nuestras tradiciones, desarrollar nuestro lado creativo, mostrar imaginación y, sobre todo, derribar los estándares administrativos, que nos empujan a entrar en las medidas dictatoriales de la inteligencia artificial.
FIN