Es muy grato compartirles que todas y cada una de las personas tienen mucho potencial para estudiar en la Universidad, desarrollar sus habilidades y competencias del programa o Licenciatura de su interés y posteriormente ser grandes profesionistas.
¿Cómo será mi trayectoria por la Universidad? Es una pregunta que muchos jóvenes se hacen cuando están en preparatoria, los temores afloran conforme se va acercando el momento de tomar la decisión de continuar sus estudios, y aunque tienen una gran ilusión, la incertidumbre les genera inquietud ante el reto.
Llegado al punto anterior, les comparto una gran noticia: la diferencia de estudiar en la preparatoria y la Universidad radica en el interés que se tiene en cada etapa por aprender, es decir, muchas de las veces los estudiantes de preparatoria no tienen mucho interés en algunas asignaturas, por lo que aprobarlas es todo un reto, generando una presión por la situación y muchas veces frustración. En cambio, en la Universidad la situación es muy diferente, es decir, todo lo que incluye el programa de estudios que cursa el alumno o alumna está enfocado a la especialidad o profesión que desea, de ahí que el interés por aprender es mucho más grande y la facilidad para lograrlo es mucha.
Y es que, aprender cuando nos interesa un tema es mucho más fácil, que cuando no nos interesa. Los neurocientíficos como Mario Alonso Puig, han descubierto que el estímulo o motivación que se tiene para aprender hace que el cerebro se comporte como una esponja, absorbiendo el conocimiento. De ahí que la diferencia de estudiar en la Universidad comparada con estudiar en la preparatoria es evidente.
Así que, si tú eres una persona que está tomando la decisión de continuar con tus estudios universitarios, no te preocupes, tienes el potencial y mientras tengas el interés, todo lo podrás lograr. Pero no olvides que adicional del interés, deberás tener disciplina, que es el ingrediente necesario para que se obtengan los resultados.
Ten por seguro que tu trayectoria por la Universidad será increíble, pues cada vez que estés consciente que aprendiste, te sentirás muy bien contigo mismo o misma y continuarás queriendo aprender más.
La seguridad que te da el conocimiento y las habilidades desarrolladas durante tu estancia en la Universidad serán percibidas por quienes te rodean y serán tu carta de presentación en un trabajo.