Roberto Lemus / Grupo Cantón.
TULUM. — En plena temporada de anidación, la bióloga Rocío Peralta, coordinadora del Programa de Conservación de Tortuga Marina Kanaan Ak en el municipio de Tulum, lanzó un llamado a la conciencia y colaboración ciudadana para proteger a estas especies, algunas de ellas en peligro crítico de extinción.
Desde la playa de Punta Piedra, donde actualmente se registran nueve nidos de tortuga Caguama, Peralta subrayó que México es considerado el país de las tortugas marinas, y Quintana Roo alberga cuatro de las seis especies que llegan al país. “Somos el Estado de las tortugas marinas, y tenemos que protegerlas”, afirmó.
En Tulum operan actualmente siete programas de conservación a cargo de distintos grupos ambientales, quienes coordinan acciones para proteger los nidos, reubicar aquellos en zonas de riesgo, e instalar corrales de incubación, según lo permite la Norma Oficial Mexicana. Peralta explicó que casi el 90% de la playa Punta Piedra está protegida, aunque la presión turística representa un constante desafío.
“El problema es que muchas personas no respetan la señalización. Tiran basura, colocan ropa sobre los nidos marcados o incluso se llevan las estacas. Eso impide que se cumpla el ciclo natural de estas especies”, lamentó la bióloga.
La tortuga Caguama, la primera en llegar cada año, tiene la particularidad de anidar muy cerca del agua, lo que la vuelve especialmente vulnerable al oleaje y al contacto humano. Para el próximo mes se espera la llegada de la tortuga verde, otra especie en vigilancia.
Durante el periodo de anidación, que va de mayo a octubre, está prohibido el ingreso de perros a las playas, ya que representan un riesgo sanitario y físico para los nidos.
“Los perros escarban, orinan y defecan en la arena. Su excremento puede contener larva migrans, un parásito que ingresa al cuerpo humano a través de la piel”, alertó Peralta.
La bióloga también recomendó no interferir con las tortugas en proceso de eclosión.
“Si las ven salir en la noche, por favor no las toquen ni las ayuden. Ellas deben recorrer la playa solas, porque las que nacen aquí regresarán años después a este mismo lugar. Si interrumpimos ese recorrido, rompemos su ciclo natural”, explicó.
Finalmente, pidió a la ciudadanía que, en caso de avistar alguna tortuga desorientada en calles o carreteras, se comuniquen de inmediato al 911 o con la Guardia Nacional, para que el equipo de conservación pueda intervenir a tiempo.
“Tenemos voluntarios y técnicos, pero necesitamos de la comunidad. Solo así lograremos proteger este patrimonio natural que pertenece a todos”, concluyó.