“El arte es un termómetro social y una herramienta de sensibilización. Es lamentable que este tipo de iniciativas no sean valoradas por todos” Dijo uno de los organizadores.
Redacción / Grupo Cantón
TULUM.- La escultura de un ajolote elaborada con materiales reciclados fue destruida poco después de su instalación en la Bioferia 2025, un evento dedicado a la concienciación ambiental en Tulum.
El hecho generó indignación entre organizadores y asistentes, quienes señalaron que el acto de vandalismo refleja la necesidad de fortalecer la educación ambiental en la comunidad.
La pieza, creada por artistas locales, buscaba resaltar la importancia del reciclaje y la conservación de especies en peligro. Como parte de la exhibición artística del evento, el ajolote representaba un símbolo de resistencia y conciencia ecológica.
“El arte es un termómetro social y una herramienta de sensibilización. Es lamentable que este tipo de iniciativas no sean valoradas por todos”, expresó Alonso, uno de los organizadores de la Bioferia 2025.
Junto a la escultura del ajolote, la Bioferia exhibió otras piezas con mensajes de impacto social, entre ellas una instalación de luces de neón rosa, que simbolizaba el apoyo a la equidad de género. Además, el evento reunió a activistas, emprendedores y expertos en sustentabilidad, ofreciendo talleres de reciclaje, conferencias sobre conservación y exhibiciones de productos ecológicos.
A pesar del acto de vandalismo, los organizadores reafirmaron su compromiso con la educación ambiental y la promoción de proyectos sostenibles. “No podemos detenernos por estos incidentes. Esto solo refuerza la necesidad de seguir trabajando en la concienciación ecológica”, agregaron.
Especialistas en conservación han señalado que la transformación cultural en temas ambientales es un proceso que requiere la colaboración de autoridades, educadores y ciudadanos. Mientras tanto, la Bioferia 2025 cerró con una asistencia significativa y con el compromiso de impulsar nuevas iniciativas en favor del medio ambiente en Tulum.
