Tulum.- Una alumna de la Escuela Secundaria General Número 15 “Zamná” fue golpeada en la nariz por un compañero, sufriendo fractura de tabique, pero la dirección de la escuela no tomó medida correctiva alguna contra el agresor, denunció la madre de esta joven, quien señaló que también sabían que había una situación de acoso entre estos dos estudiantes, sin que le informaran de ello.
Saraí Nolberto señaló que esta agresión ocurrió el pasado martes. A ella le llamaron y cuando acudió al plantel, vio a su hija con la ropa ensangrentada dentro de la prefectura, junto con el agresor. Su hija lloraba y no podía explicar lo que había pasado, pero el personal del lugar le dijo que el otro alumno tropezó a su hija con el pie, por lo que ella reaccionó y le lanzó un golpe. El agresor respondió dándole un puñetazo en la nariz.
El plantel no le brindó ningún tipo de atención médica a la menor golpeada y le aclararon a la madre que el caso no estaba cubierto por el seguro escolar. Para ellos, el caso era solo “cosas de niños” y no suspendieron al alumno causante de esta agresión.
La madre narró que fue entonces que se enteró que su hija tenía un problema con este otro alumno desde hace 15 días, algo que sabía la directiva, pero sin que le informaran de ello, pues, según le explicaron, aplican un protocolo en el que primero informan a trabajadores sociales y a maestros, antes de notificar a los padres.
La menor fue llevada de urgencias a un hospital, en donde con radiografías confirmaron la fractura del tabique nasal, lo que requirió de yeso, además de dos puntos. Hasta ahora, le ha tocado pagar a esta familia 5 mil pesos en gastos médicos. Esta alumna quedó con un mes de incapacidad, mientras su agresor continúa acudiendo al plantel.
Inconforme, la mujer acudió a la Fiscalía General del Estado en Tulum para solicitar una orden de restricción, pero allí le dijeron que por ser el agresor un menor de edad, tenía que viajar a Cancún a interponer allí su denuncia.
“Sea como sean las cosas, esto es violencia”, criticó la madre. “No justifico la reacción de mi hija, y sí, son niños, pero esto es violencia”.