Paloma Wong / Grupo Cantón
CHETUMAL.- Mejores salarios y condiciones laborales son las peticiones que hace el sector obrero de la zona sur del Estado hizo al Gobierno Federal, esto tras la toma de protesta de Claudia Sheinbaum Pardo como presidenta Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, quien se comprometió a seguir cumpliendo con las acciones a favor de los ciudadanos.
Este martes, Claudia Sheinbaum Pardo rindió protesta como presidenta Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos para el periodo 2024-2030, quien mencionó que este es el inicio del segundo piso de la cuarta transformación de la vida pública de la republica, en el cual por primera vez en más de 500 años –que se tenga registro- se puede ver por primera vez a una mujer al frente de la presidencia de la República.
Si bien hoy inicia la administración federal, del periodo 2024-2030, el representante de la CTM en Othón P. Blanco, Leopoldo Sosa Cetina, precisó que se tienen grandes expectativas con este nuevo gobierno federal, del cual se esperan tener mejores salarios y condiciones laborales.
SALARIOS Y OPORTUNIDADES
“De lo único que pedimos es mejores salarios para los trabajadores y oportunidades en el área laboral, y sobre todo que se busquen reformas para que se sigan preservando los contratos colectivos que por años ha logrado mantener el sector obrero”, apuntó.
A su vez, los integrantes del ramo de la construcción esperan que no se paralicen las obras con estos cambios, no solo a nivel federal sino que también local, pues los 11 Ayuntamientos de Quintana Roo fueron renovados previo a la toma de protesta de la presidencia de la República.
En este sentido, el dirigente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción en Quintana Roo, Ulises Morales Estrada, hizo un llamado a los 11 ayuntamientos para que les tomen en cuenta en sus próximas licitaciones, ya que durante la administración 2021-2024, lograron obtener apenas el 30 por ciento de las obras municipales.
Ya que con el cierre de la administración federal, dijo, también sufren un impacto negativo en su actividad, tomando en cuenta también el déficit que arrastran en cuanto a mano de obra, y un 40 por ciento de empresas inactivas por no poder acceder a licitaciones.