REDACCIÓN / GRUPO CANTÓN
La tragedia indescriptible que ha conmovido a la región desde el pasado sábado, cuando un autobús que viajaba de Cancún a Tabasco registró un fatal accidente a 180 kilómetros de Villahermosa, sobre la carretera que conecta con la Península y la Riviera Maya, sigue generando reacciones entre la comunidad. El vehículo, con más de 40 personas a bordo, se impactó de frente contra un tráiler que presuntamente invadió el carril del autobús, lo que generó uno de los peores desastres carreteros en esta vía.
Ahora, vecinos de la zona, quienes se acercaron para ayudar a las víctimas, narran cómo las llamas rápidamente envolvieron el autobús tras el choque, dejando a los pasajeros atrapados en su interior. Las puertas del vehículo quedaron bloqueadas por el impacto, lo que impidió la salida de los pasajeros. Mientras que los sobrevivientes pudieron salir rompiendo las ventanas de la unidad mientras se incendiaba. A pesar de los esfuerzos, muy poco pudieron hacer, ante las súplicas de ayuda de quienes perdían la vida en ese momento.
Una de las vecinas, de identidad reservada, contó que la tragedia ocurrió alrededor de las 3:00 de la madrugada, cuando el impacto se escuchó y los habitantes aledaños salieron para saber qué ocurría. Relataron la desgarradora escena. “Las llamas estaban muy altas, no se podía hacer casi nada, intentamos ayudar, pero era imposible. Solo escuchábamos los lamentos dentro del autobús de la gente pidiendo ayuda. Auxiliamos a las niñas que salieron y a los que alcanzaron a saltar. Fue una verdadera tragedia”, comentó una vecina de la zona.
A pesar de los esfuerzos de los testigos, debido al fuego el acceso fue difícil y a pesar de que solicitaron ayuda a los números de emergencias desde el momento en que vieron el accidente, los equipos de rescate y emergencia no llegaron sino hasta las 6:00 de la mañana, es decir, tres horas después de que comenzaron las solicitudes de apoyo.
Hasta el momento, los sobrevivientes han sido trasladados a diferentes hospitales: 3 personas fueron hospitalizadas en Villahermosa, 2 en Palenque, Chiapas, y 2 más en el hospital general de Cárdenas, Tabasco. 2 de los sobrevivientes no requirieron atención médica. La línea de autobuses involucrada en el accidente confirmó que el conductor del autobús, Rosalino Jiménez, y su ayudante, Ricardo Mendoza, perdieron la vida durante el incendio.
Solo nueve personas lograron sobrevivir al incidente, pero la tragedia cobró la vida de al menos 30 personas, aunque la cifra final aún no ha sido confirmada oficialmente. Las autoridades de Tabasco y Campeche se encuentran colaborando en la identificación de los fallecidos, ya que el autobús hizo una escala antes del desastre, lo que complica la contabilización exacta.
