REDACCIÓN / GRUPO CANTÓN
Chetumal.- Con el objetivo de garantizar un mejor servicio de agua potable para los y las chetumaleñas, la gobernadora Mara Lezama Espinosa, acompañada por el director de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA), Hugo Garza Sáenz, entregó la obra de sustitución del acueducto de 14 pulgadas por uno de 24, de polietileno de alta densidad. Esta obra abarca el tramo desde el cárcamo del aeropuerto hasta el cruce de la avenida Revolución, sobre la avenida Álvaro Obregón.
“La agua es un derecho, no es un privilegio”, afirmó la Gobernadora, quien destacó que la nueva infraestructura beneficiará a más de 15 mil habitantes de la capital del estado. En su discurso, Lezama Espinosa recalcó que este esfuerzo forma parte del compromiso del gobierno estatal por mejorar la calidad del servicio de agua potable en Chetumal, una de las prioridades de su administración.
En total, se instalaron más de 2 mil metros lineales de tubería de polietileno de alta densidad, una de las tecnologías más avanzadas en el sector. “Con una inversión conjunta entre el gobierno estatal y federal que supera los 15 millones de pesos, buscamos mejorar el servicio que los ciudadanos merecen. Además, se incorporaron sistemas de admisión y expulsión de aire con tres válvulas y cajas de válvulas, lo que hace más eficiente el abastecimiento del agua”, explicó la Gobernadora.
Mara Lezama reiteró que el acceso al agua potable es un derecho fundamental que debe ser garantizado a todos los ciudadanos y señaló que esta obra es un ejemplo de cómo el gobierno combate la corrupción para asegurar que los recursos sean destinados al bienestar de la población. “Cuando se combate la corrupción, el dinero alcanza para más y lo que es del pueblo, regresa al pueblo”, subrayó.
La Gobernadora enfatizó que este es un claro ejemplo de la nueva forma de gobernar, bajo el marco del Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo, en el que se buscan acortar las brechas de desigualdad y atender necesidades que fueron ignoradas por gobiernos anteriores. “Aunque esta obra esté debajo del asfalto, su impacto se reflejará en la mejora de la calidad de vida de los chetumaleños”, concluyó Lezama Espinosa.
