AGENCIA SIM / GRUPO CANTÓN
José María Morelos.- A pesar del entusiasmo y la gran participación de la comunidad en las ligas de softbol en José María Morelos, el municipio enfrenta una notable carencia de árbitros capacitados para dirigir los partidos. Esta falta de profesionales en la materia está afectando la calidad y el desarrollo de los encuentros deportivos.
Zacarías Vázquez, promotor deportivo local, informó sobre el problema, destacando que algunas comunidades han solicitado la expansión de la liga de beisbol para incluir a todo el municipio. Sin embargo, los organizadores se enfrentan a un desafío importante: la falta de árbitros con el conocimiento adecuado de las reglas del deporte.
“Es una desventaja que tenemos, ya que personas sin el conocimiento adecuado se ven obligadas a arbitrar solo para recibir un pago. Esto ha generado numerosos reclamos por parte de jugadores y aficionados”, explicó Vázquez. La falta de formación y experiencia en los árbitros actuales ha resultado en decisiones cuestionables y un impacto negativo en la experiencia general de los partidos.
Vázquez subrayó la necesidad urgente de contar con una escuela de árbitros o algún profesional que pueda capacitar a los interesados en arbitrar. “Hay gente que sí quiere participar, pero necesitan conocer las reglas a fondo para poder hacerlo de manera efectiva”, agregó.
La situación es especialmente crítica con la inminente apertura de la liga nocturna, que contará con la participación de ocho equipos, cuatro de ellos provenientes de comunidades y el resto de la cabecera municipal. La aceptación y el apoyo de las familias morelenses hacia este deporte es evidente, con la presencia de familias enteras en los encuentros. Por lo tanto, la profesionalización del arbitraje se vuelve aún más crucial para mantener la calidad y el orden en los partidos.
Vázquez y otros organizadores esperan que, con el tiempo, se puedan implementar soluciones efectivas para mejorar la formación de árbitros y asegurar que las ligas deportivas en José María Morelos puedan desarrollarse con el nivel de profesionalismo y calidad que merecen.