REDACCIÓN / Grupo Cantón
COZUMEL.- La gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, afirmó que “no se le está quitando nada a Cozumel” en relación con las críticas surgidas tras la aprobación del nuevo impuesto de saneamiento ambiental. Este impuesto, de cinco dólares por crucerista, fue avalado por el Cabildo de Cozumel y los recursos recaudados serán gestionados por el gobierno estatal, lo que ha generado polémica entre sectores de la oposición.
En un evento público, Lezama aclaró que los recursos serán destinados íntegramente al beneficio de Cozumel y garantizó que su administración no permitiría afectaciones a la isla. “Que nadie se confunda, que nadie les quiera confundir, nada, absolutamente nada se le está quitando a Cozumel. Yo, como mujer con valores que me enseñaron mis padres, jamás lo permitiría; se van a recibir recursos como nunca antes”, enfatizó.
El gobierno estatal se comprometió a crear un fondo administrado de forma conjunta por representantes del gobierno municipal, estatal, empresarios y la sociedad civil. Según el plan, el 30% de los recursos se destinarán a la prevención de desastres, mientras que el 70% restante será empleado en el mantenimiento y seguridad de los puertos de la isla.
Pese a estas declaraciones, sectores opositores han señalado que esta medida reduce la autonomía del gobierno municipal de Cozumel. Sin embargo, la mandataria aseguró que el nuevo esquema busca garantizar transparencia y un uso eficiente de los recursos en beneficio de la comunidad isleña.