Redacción/Grupo Cantón
Cozumel.- La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de Quintana Roo llevó a cabo el traslado de 13 Personas Privadas de la Libertad (PPL) desde el Centro Penitenciario de Cozumel, con el objetivo de fortalecer la gobernabilidad y la seguridad interna. Según informó la SSC, estos internos estaban involucrados en actividades que incitaban posibles disturbios al interior de las instalaciones, por lo que su reubicación se realizó con estricto apego a las indicaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH). Los reos serán distribuidos en diferentes Centros Penitenciarios del estado para salvaguardar el orden y la estabilidad.
Esta operación representa el tercer traslado en menos de un mes y el segundo en una semana, como parte del programa estatal de despresurización carcelaria implementado por el Sistema Penitenciario de Quintana Roo. A principios de noviembre, el 7 de ese mes, se realizó el traslado de 41 internos desde Cancún a Chetumal, bajo un amplio dispositivo de seguridad que incluyó al Ejército Mexicano, la Secretaría de Marina (Semar), la Guardia Nacional (GN), agentes de la Policía Ministerial y Procesal. El convoy partió poco después de la medianoche y arribó al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chetumal alrededor de las 7:00 de la mañana, donde se completaron los procedimientos de registro y asignación.
De acuerdo con fuentes penitenciarias, los internos trasladados en estas operaciones enfrentan sentencias por delitos de alto impacto, como robo con violencia, homicidio calificado, violación y narcomenudeo. El primer movimiento se efectuó el 18 de octubre, con 12 reos enviados de Chetumal a Cancún. Posteriormente, un grupo de 70 arribó a Chetumal desde Cancún, y con los 41 del 7 de noviembre, suman 123 internos reubicados en apenas 20 días.
Estas acciones forman parte de una estrategia penitenciaria estatal y federal para redistribuir la población carcelaria entre los centros de Cancún, Chetumal, Cozumel y Playa del Carmen. Fuentes oficiales indicaron que el objetivo es garantizar la seguridad interna, reducir la sobrepoblación en las cárceles y fortalecer los protocolos de reinserción social, en cumplimiento con los lineamientos del Sistema Penitenciario Nacional.