REDACCIÓN / GRUPO CANTÓN

CHETUMAL.- Al menos ocho cabezas de ganado murieron en un potrero del poblado de Álvaro Obregón, en la Ribera del Río Hondo, provocando cuantiosas pérdidas económicas al productor ganadero. Aunque aún no se han determinado las causas exactas, se sospecha que los animales podrían haber muerto por intoxicación al ingerir bolsas de plástico con residuos de fertilizante “Urea”.

El ingeniero Ramón Gaona, propietario del ganado afectado, describió su sorpresa al encontrar los cuerpos sin vida dispersos en su terreno. Al inspeccionar el área, Gaona descubrió que los fuertes vientos recientes podrían haber arrastrado las bolsas de fertilizante hasta el potrero, donde los animales las consumieron. Este fertilizante, que se utiliza en la caña de azúcar para mejorar su crecimiento, contiene compuestos químicos altamente peligrosos que podrían haber causado la muerte de los animales.

Según los datos obtenidos, las bolsas de plástico que contenían los residuos de “Urea” fueron ingeridas por los animales, lo que les provocó una grave intoxicación. Gaona explicó que, aunque aún no se sabe con certeza cómo llegaron las bolsas a su propiedad, es posible que hayan sido arrastradas por el viento desde los campos de caña cercanos.

Ante esta situación, Gaona exhortó a los productores de caña a ser más conscientes y tomar precauciones al aplicar fertilizantes y otros químicos en sus cultivos. Hizo un llamado a manejar adecuadamente los residuos agrícolas para evitar incidentes trágicos como este, que no solo afectan a los productores ganaderos sino también al medio ambiente.