Por Carlos May / Grupo Cantón

CANCÚN.- La Supermanzana 107 de Cancún, que agrupa los fraccionamientos Paraíso Maya y Urbi, se ha convertido en los últimos días en un vertedero de excremento las 24 horas del día.

Muestra de lo anterior es que en la mayoría de las calles corren ríos de excrementos que se convierten en un foco rojo de infección. Desde avenida del Rey-que es la vía principal-pasando por Sevilla, Galarde y hasta Ibiza, la situación es la misma.

La problemática se repita en la gran mayoría de las calles, donde los encharcamientos de aguas negras son el cultivo perfecto para la proliferación de mosquitos y otras enfermedades.

Además, estos focos rojos de infección están cerca de negocios ambulantes de comida, lo que convierte la situación aún más preocupante.

El pasado 13 de mayo de 2024, de acuerdo con Antonella Vázquez Cavedon, representante legal de Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano, A.C. (DMAS), el Juez Quinto de Distrito con sede en Cancún, dictó sentencia a favor de los habitantes del fraccionamiento Urbi Villas del Rey, por lo que requirió al titular de la Secretaría de Desarrollo Territorial Urbano Sustentable (Sedetus) de Quintana Roo, iniciar el procedimiento de ejecución de la fianza para la construcción de la planta de tratamiento de aguas negras.

La anterior medida beneficiará a alrededor de 20 mil vecinos del desarrollo; sin embargo, por el momento, los habitantes continúan sufriendo con los olores pestilentes y aguas puercas.

La situación de la falla en el drenaje no es privativa de Urbi, pues en el fraccionamiento Paraíso Maya-donde también habitan miles de personas- la problemática en similar y no menos desagradable.