ALFREDO RODRÍGUEZ / Grupo Cantón
Aguakan pretende adueñarse del área verde de una glorieta en Polígono Sur de Cancún, a pesar de que en la zona existen múltiples predios en venta, con el pretexto de que necesita espacios para construir un tanque de agua potable para subsanar la falta de líquido en la zona.
La empresa Desarrollos Hidráulicos de Cancún, propiedad de los hermanos Jorge y José Luis Ballesteros Franco, obtuvo el primer trimestre del año ingresos por más de 911 millones de pesos, de los cuales, tras gastos e impuestos, le generaron en una utilidad neta de 162.3 millones de pesos.
Pese a estos millonarios ingresos, la empresa quiere apropiarse del espacio verde ubicado en el cruce de las Avenidas 135 (Citinche) y Avenida La Rioja, para convertirla en un predio de su propiedad y edificar el tanque.
Actualmente, Aguakan tiene sumidos en la crisis de abasto de agua a los habitantes de los nuevos desarrollos habitacionales de la zona sur de Cancún, quienes padecen constantes fallas en el suministro y muy baja presión del mismo, lo que impide que el agua suba a sus tinacos, orillándolos a instalar bombas de agua para poder tener abasto.
Esto se ha traducido también en mayores costos de energía eléctrica para los vecinos, quienes día con día deben utilizar sus propios sistemas de bombeo para procurarse la llegada del agua, ante la ineficiencia operativa de Aguakan que no envía el agua con la suficiente presión.
La glorieta de la que quiere apoderarse la empresa de los Ballesteros es el único espacio verde de esa zona, que se ha visto devorada por la mancha urbana y los múltiples desarrollos habitacionales.
Incluso esa misma rotonda es utilizada por el Ayuntamiento de Cancún para hacer el acopio de árboles de Navidad, mismos que luego son convertidos en composta para servir de abono de diversas áreas del municipio, destacando con ello el valor como área verde de la glorieta de Polígono Sur.
Frena infraestructura
A pesar de la crisis de agua que existe en Benito Juárez, por la falta de presión del vital líquido, la empresa Aguakan recortó casi a la mitad su inversión en infraestructura, y no ha realizado obras para resolver esa deficiencia, que es una de sus obligaciones asumidas por el título de concesión.
“Los ingresos por construcción en el 1T 2024 (primer trimestre de 2024) ascienden a 70.6 millones de pesos, monto menor en 46.1% del año anterior, que ascendían a 131 millones de pesos”, señala el reporte de Resultados de las Operaciones y Perspectivas difundido por la Bolsa Mexicana de Valores.
Ante el ineficiente servicio, así como los constantes abusos en cobros a ciudadanos, que han enfrentado embargos de la empresa por deudas exageradas de recargos por morosidad, los diputados de Quintana Roo aprobaron el Decreto 195 que abrogaba su concesión el 31 de diciembre pasado.
Sin embargo, la empresa recurrió al amparo, y freno en definitiva dicho decreto, por lo que su concesión permanece, hasta ahora, vigente al año 2053.
El 29 de diciembre de 2023, la calificadora Fitch & Ratings colocó en “Observación Negativa” la calificación de Aguakan, ante la posibilidad de la extinción de su concesión y el estado financiero de la misma, advirtiendo que estará en constante revisión incluso de la reputación de la empresa.
“Fitch seguirá monitoreando los impactos negativos potenciales a nivel de operaciones, reputación, liquidez, entre otros. Al tiempo, esperará más claridad sobre estos temas. En caso de una resolución desfavorable, podría darse una baja de varios niveles a la calificación”, alertó entonces la calificadora.
Y aunque los estados financieros reflejan una solidez financiera de la empresa, producto del cobro de agua potable a millones de usuarios de Benito Juárez, Isla Mujeres, Puerto Morelos y Solidaridad, la empresa quiere adueñarse de la rotonda, que es un espacio público y verde, en lugar de adquirir un predio para edificar el tanque de agua.