La pasión por el fútbol llega a tomar tintes de fanatismo con historias que sorprenden a propios y extraños.
Una de ellas se suscitó en Suiza, donde un sacerdote estafó a los feligreses de su iglesia con el objetivo de viajar a Rusia para ver la Copa del Mundo.
A 50 feligreses logró convencer para que les hicieran depósitos con el fin de ayudar a zonas de África con pobreza extrema, sin embargo, su objetivo era el antes mencionado.
En tierras mundialistas decidió asistir a algunos partidos y apostar en otros tantos, acciones que posteriormente lo hicieron arrepentirse y confesar a los parroquianos su mentira.
Ahora podría enfrentarse a demandas por el monto de 1.1 millones de dólares que recibió, un caso que ha dado toda la vuelta al mundo.