Corea del Sur.– Una profesora de Primaria la quitó la vida a puñaladas de una niña de ocho años que estudiaba en el colegio donde ella trabajaba en la ciudad de Daejeon, en Corea del Sur.
La familia de la menor reportó su desaparición, pues fueron en busca de la pequeña después de que ella salió de la escuela, pero no subió al autobús que debía abordar.
Tras una intensa búsqueda, ambas, tanto la profesora como la niña, fueron halladas con heridas de arma blanca en la segunda planta del colegio, por lo que en un principio la policía sospechó que una tercera persona pudo cometer el ataque.
La menor presentaba heridas de arma blanca en la cara y los hombros en la sala de audiovisuales.
Los equipos de emergencia transportaron de urgencia a ambas a instalaciones hospitalarias, pero la niña llegó sin vida al Hospital
La policía explicó que la maestra, que estaba consciente, confesó haber sido la autora de la agresión y que se autolesionó tras el ataque.
La docente, que tiene entre 40 y 50 años, había obtenido una baja por depresión y había vuelto a trabajar en el colegio en diciembre.
La docente compró un cuchillo en un mercado cercano el mismo día del ataque y planeó el crimen sin un objetivo específico, informó el diario The Korea Herald. De acuerdo a las propias palabras de la mujer eligió al azar a la última alumna que saliera del aula.
“No me importaba quién. Para morir juntos, elegí a la última alumna que saliera del programa extraescolar. Le dije que tenía un libro para darle y la llevé a la sala de audiovisuales. Luego la estrangulé y la apuñalé”, declaró la maestra a la Policía.
Choi Sang-mok, presidente de Corea del Sur en funciones, ofreció su pésame durante una reunión del Gabinete por la muerte de la niña y ordenó al Ministerio de Educación y a las autoridades que investigaran a fondo el incidente en la escuela de la ciudad de Daejeon.
