El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, declaró un “estado de ley marcial de emergencia” el martes, acusando a la oposición de controlar el Parlamento, simpatizar con Corea del Norte y paralizar al gobierno con actividades antiestatales.
“Para salvaguardar a una Corea del Sur liberal de las amenazas que plantean las fuerzas comunistas de Corea del Norte y para eliminar a los elementos antiestatales (…) declaro por la presente la ley marcial de emergencia”, dijo Yoon en un discurso televisado en directo a la nación.
Describió la ley marcial como una medida necesaria para erradicar a estas “desvergonzadas fuerzas antiestatales pro-Corea del Norte”.
Según el Primer Decreto de Ley Marcial , todas las actividades políticas, incluidas las de la Asamblea Nacional, los partidos, las asociaciones y las manifestaciones, quedan estrictamente prohibidas. Además, cualquier intento de subvertir el sistema democrático, junto con la difusión de noticias falsas o la manipulación de la opinión pública, será considerado ilegal.
Asimismo, quedan prohibidas las huelgas, los paros laborales y las reuniones que puedan alterar el orden social. Particularmente, se ordenó a los médicos y al personal sanitario en huelga regresar a sus labores en un plazo de 48 horas, bajo amenaza de sanciones legales.
La Asamblea Nacional de Corea del Sur aprobó por unanimidad la resolución para levantar la ley marcial impuesta por el presidente Yoon Suk Yeol minutos antes. Los 190 legisladores presentes votaron a favor.