Redacción / Grupo Cantón
Ciudad del Vaticano.- Durante una audiencia con la Asociación Nacional de Municipios Italianos (ANCI), el pontífice señaló que las ciudades enfrentan diversas formas de marginalidad, violencia y soledad que requieren atención urgente. En ese contexto, destacó de manera particular lo que calificó como “la plaga de los juegos de azar”.
León XIV subrayó que las estadísticas muestran un incremento significativo de esta práctica en los últimos años y, citando el informe anual de Cáritas, explicó que se trata de un problema serio en materia educativa, de salud mental y de confianza social.
Además, lamentó otros males que afectan a las ciudades italianas, como los problemas psicológicos, la depresión, la pobreza cultural y espiritual, así como el abandono social. A su juicio, todas estas realidades son señales claras de la necesidad de esperanza en el mundo contemporáneo.
El papa instó a la clase política a promover relaciones auténticamente humanas entre los ciudadanos como una vía para fortalecer la paz social. Recordó a los dirigentes municipales que la cohesión social y la armonía cívica comienzan con la escucha de los más débiles y pobres, advirtiendo que sin ese compromiso la democracia se debilita.
Finalmente, León XIV exhortó a los regidores a tener el valor de ofrecer esperanza a la población y a construir de manera conjunta un mejor futuro para sus territorios, al tiempo que mencionó otros desafíos como la crisis demográfica, la contaminación, la soledad de los adultos mayores, los conflictos sociales y las dificultades que enfrentan familias y jóvenes.