El Papa Francisco experimentó una crisis respiratoria este viernes, requiriendo ventilación mecánica. Su estado sigue siendo reservado, pero permanece alerta.
Internacional.- Este viernes, el Papa Francisco sufrió una crisis respiratoria aislada que obligó a los médicos del Vaticano a intervenir de forma inmediata. Según el último reporte de salud emitido por el Vaticano, el sumo pontífice argentino necesitó someterse a una ventilación mecánica no invasiva para poder respirar correctamente.
La crisis respiratoria fue desencadenada por un episodio de vómitos con inhalación, lo que provocó un empeoramiento repentino de su condición respiratoria. A pesar de este cuadro crítico, el Papa ha permanecido alerta y orientado, y se ha mostrado cooperativo con los tratamientos médicos indicados.
Pronóstico reservado pero bajo vigilancia
El reporte oficial subrayó que, aunque el Papa está recibiendo atención médica, su pronóstico sigue siendo reservado. Los médicos han expresado que están realizando todas las intervenciones necesarias para estabilizar al pontífice, pero, por el momento, no se puede determinar con certeza la evolución de su estado de salud.
Es importante destacar que el Papa Francisco continúa colaborando activamente en los tratamientos terapéuticos, lo que refleja su constante disposición para superar este momento de salud delicado.
