REDACCIÓN / GRUPO CANTÓN
Busán, Corea del Sur – Un avión de pasajeros de la aerolínea Air Busan se incendió este martes en el Aeropuerto Internacional de Busán, generando un gran susto entre los 176 ocupantes a bordo. El incidente ocurrió alrededor de las 22:30 horas locales, cuando el timón trasero de la aeronave comenzó a arder, lo que obligó a una evacuación inmediata y exitosa de los pasajeros y tripulantes.
Según informó la agencia de noticias Yonhap, el vuelo tenía como destino Hong Kong y a bordo viajaban 169 pasajeros y siete miembros de la tripulación. Todos lograron evacuar la aeronave de forma segura utilizando los toboganes inflables de emergencia. Afortunadamente, no se reportaron heridos en el incidente, aunque la causa del incendio aún se encuentra bajo investigación.
Este accidente ocurre poco más de un mes después del trágico desastre aéreo ocurrido el 29 de diciembre en Corea del Sur, cuando un Boeing 737-800 de la aerolínea Jeju Air, procedente de Tailandia, sufrió un aterrizaje de emergencia en Muan y explotó tras colisionar con una barrera de hormigón. De los 181 ocupantes de ese vuelo, solo dos personas sobrevivieron, lo que dejó una profunda conmoción en el país.
Este nuevo incidente en Busán ha elevado aún más las preocupaciones sobre la seguridad aérea en Corea del Sur, un país que ha logrado avances significativos en los últimos años para mejorar sus estándares de aviación. Las autoridades surcoreanas continúan investigando las causas del incendio mientras se intensifican las medidas de seguridad en los aeropuertos y aerolíneas del país.
El incidente también plantea interrogantes sobre la confiabilidad de las aeronaves comerciales y la preparación de las tripulaciones ante situaciones de emergencia, dado que la rápida evacuación evitó tragedias mayores. Sin embargo, los expertos coinciden en que es necesario mantener y reforzar las prácticas de seguridad para garantizar la integridad de los pasajeros y la tripulación en vuelos comerciales.
Se espera que las autoridades surcoreanas emitan un informe preliminar sobre las causas del incendio en los próximos días, mientras continúan tomando medidas para evitar futuros incidentes.