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24 abril, 2024

Mundo

"Le di una pastilla y luego la maté". Hermano de la modelo Pakistaní

El hermano de la modelo pakistaní, Qandeel Baloch, famosa por los vídeos de contenido erótico que compartía en redes sociales, ha reconocido que estranguló hasta la muerte a su hermana y ha añadido que no se siente “avergonzado” por ello.

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El hermano de la modelo pakistaní, Qandeel Baloch, famosa por los vídeos de contenido erótico que compartía en redes sociales, ha reconocido que estranguló hasta la muerte a su hermana y ha añadido que no se siente “avergonzado” por ello. Muhammad Wasim fue arrestado un día después de la muerte, después de que su padre pusiera una denuncia. El asesinato de Baloch ha reavivado el debate sobre los denominados “crímenes de honor”, que normalmente cometen por familiares amparándose en un sentimiento de vergüenza o deshonor. Según la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán (HRCP), 262 mujeres han fallecido en lo que va de año víctimas de este tipo de crímenes.

“Ella estaba en la planta baja y nuestros padres estaban dormidos en la azotea. Fue alrededor de 22.45. Le di una pastilla y luego la maté”, declaró Wasin este domingo en una conferencia de prensa. El asesino confeso aseguró que actuó solo y que no se arrepiente de ello, ya que el comportamiento de su hermana era, en su juicio, “completamente intolerable”.

Baloch, era una joven de 25 años, cuyo nombre real era Fauzia Azeem. Una de sus actuaciones más comentadas fue la difusión de una foto en la que aparecía con un conocido clérigo y que después fue rechazado por el Ministerio de asuntos religiosos de su país. Ella denunció en la prensa que había recibido amenazas de muerte a raíz de la controversia, y que las autoridades habían ignorado sus peticiones de protección. En su último comentario en el muro de Facebook, aseguró que estaba tratando de cambiar la mentalidad ortodoxa de su país. Su post recibió más de 67.000 reacciones en la red social.

Los asesinos de los crímenes de honor generalmente quedan en libertad si la familia los perdona. Una ley permite que el homicida, que a menudo también es un pariente, esquive la cárcel pagando una multa a su propia familia.

 

Información: El País

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