John Tinniswood, el hombre más viejo del mundo, murió a los 112 años.

Tinniswood falleció el día de ayer lunes en un asilo de Southport, Inglaterra.
“Su último día estuvo rodeado de música y amor”, dijo su familia a GWR en un comunicado.
Nacido en Liverpool el 26 de agosto de 1912, Tinniswood había sido reconocido en abril como el hombre vivo más longevo del planeta.
Nacido el mismo año en que se hundió el Titanic y viviendo en ambas Guerras Mundiales, Tinniswood le dijo a Guinness World Records que el secreto de su longevidad era “pura suerte”.

Mantuvo un cerebro activo durante su vejez, lo que potencialmente contribuyó a que viviera tanto tiempo. Se mantenía al tanto de las noticias todos los días y administraba todas sus propias finanzas.

Tenía un consejo para mantenerse sano: hazlo todo con moderación.

“Si bebes demasiado, comes demasiado o caminas demasiado, si haces demasiado de cualquier cosa, al final vas a sufrir”, afirmaba.

“Haz siempre lo mejor que puedas, tanto si estás aprendiendo algo como si estás enseñando a alguien”, decía.

“Da todo lo que tengas. Si no, no vale la pena molestarse”.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Tinniswood ocupó un puesto administrativo en el Royal Army Pay Corps y luego trabajó en cuentas para los gigantes petroleros Shell y BP.

Este hombre, además, se convirtió en el cuarto británico de mayor edad de la historia.