Mundo.- En las últimas semanas, Bolivia ha experimentado un inesperado repunte de contagios de Covid-19, especialmente en el departamento de Santa Cruz. Según el Ministerio de Salud, en la primera semana de enero se registraron 457 casos de coronavirus, además de dos decesos por la enfermedad.
Los fallecidos, un hombre de 80 años y una mujer de 96, ambos con enfermedades preexistentes, muestran la vulnerabilidad de los grupos de mayor riesgo.
La ministra de Salud, María Reneé Castro, confirmó que las variantes predominantes en el país son Ómicron y JN.1, y reiteró el llamado a la población para que acuda a los centros de vacunación. En respuesta al aumento de contagios, el gobierno adquirió medio millón de vacunas, que serán distribuidas principalmente entre los grupos más vulnerables: mayores de 60 años, mujeres embarazadas, personal de salud y personas con enfermedades de base.
Santa Cruz lidera los contagios, con 369 casos registrados de los 457 a nivel nacional, seguida por Cochabamba (45), La Paz (14) y otras regiones con cifras menores. Actualmente, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Santa Cruz reporta 11 personas hospitalizadas por el virus, de las cuales cinco están en la Unidad de Terapia Intensiva.
Las autoridades sanitarias advierten que la curva de contagios podría seguir aumentando debido a las aglomeraciones generadas por las fiestas de fin de año, y hacen un llamado a la población para que retome las medidas de prevención, como el uso de barbijo y el lavado frecuente de manos. Además, se insta a evitar la automedicación ante síntomas respiratorios.
Bolivia fue uno de los países más afectados durante las primeras olas de la pandemia, con más de 22,000 muertes reportadas entre 2020 y 2021, aunque se sospecha que el número real de víctimas fue mucho mayor. La crisis sanitaria desbordó los hospitales y generó un grave desabastecimiento de insumos médicos como el oxígeno, lo que contribuyó a un elevado número de muertes.
Desde la llegada de las vacunas en 2021, el gobierno boliviano ha intensificado las campañas de vacunación, con el objetivo de inmunizar a toda la población mayor de cinco años. A pesar de la resistencia de algunos sectores ante la vacunación, el proceso ha sido crucial para mitigar los efectos del virus y evitar un colapso del sistema de salud.
Ahora, frente a este repunte de contagios, Bolivia sigue en alerta, mientras las autoridades siguen reforzando sus esfuerzos para contener el virus y proteger a los sectores más vulnerables.