Durante su conferencia matutina, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, expuso este lunes los lineamientos de la reforma energética que se implementará en el país, subrayando que las empresas privadas, como Iberdrola, que deseen ingresar al mercado mexicano deberán seguir ciertas “reglas”.
“Esta idea de que Iberdrola entra como entraba antes, no necesariamente. Sí va a haber espacio para la inversión privada, pero con ciertas reglas”, afirmó la mandataria. Esta declaración se produce en un contexto donde la empresa española ha tenido tensiones con el gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador, que culminaron en febrero de 2024 con la compra de 13 plantas eléctricas a Iberdrola por parte del Estado mexicano, por aproximadamente seis mil 200 millones de dólares.
Sheinbaum destacó que se han aprobado nuevas regulaciones para el uso de baterías de almacenamiento de energía en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN), una medida necesaria para garantizar un suministro constante y mejorar la integración de energías renovables. Esta apertura presenta a Iberdrola una nueva oportunidad de negocio en el mercado mexicano, según un informe reciente de la empresa.
“Se van a cambiar las reglas. No puedes entrar en cualquier momento al mercado energético bajo cualquier circunstancia, porque eso podría generar problemas técnicos”, explicó Sheinbaum, enfatizando que las empresas deben cumplir con requisitos como la instalación de bancos de baterías y sistemas que aseguren un voltaje constante.
La presidenta también mencionó que, con la nueva reforma, el Estado proveerá el 54 por ciento de la energía consumida en México, mientras que el porcentaje restante estará disponible para los inversionistas privados, siempre que se garantice la adecuada transmisión de su producción energética.