Redacción / Grupo Cantón
México.- Tras casi dos semanas de hospitalización, Lex Ashton, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), fue detenido este viernes por su presunta responsabilidad en el asesinato de un compañero y el intento de homicidio de un trabajador del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Sur, ocurrido el pasado 22 de septiembre.
El joven de 19 años fue aprehendido por elementos de la Policía de Investigación de la Fiscalía de la Ciudad de México, justo al recibir el alta médica del Hospital General Regional 2 del IMSS, donde fue internado tras intentar suicidarse lanzándose del tercer piso de un edificio dentro del plantel.
Ataque con guadaña conmociona a la comunidad universitaria
De acuerdo con la información oficial, Ashton fue trasladado al Reclusorio Oriente, donde esperará su audiencia inicial. Se le acusa formalmente por los delitos de homicidio calificado y tentativa de homicidio.
El 22 de septiembre, Lex Ashton ingresó armado con una guadaña al CCH Sur y atacó a Jesús Israel, de 16 años, quien falleció en el lugar, así como a un trabajador del plantel que intentó detenerlo y permanece hospitalizado.
El ataque generó consternación nacional, especialmente por el trasfondo del agresor, quien en publicaciones previas en redes sociales mostró signos de pertenecer a grupos incel, conocidos por su discurso misógino, violento y antifeminista. En dichos mensajes, Ashton expresó frustración, aislamiento social y odio hacia mujeres y hombres exitosos, utilizando términos propios de esa comunidad como “foids” y “chads”.
“Ya lo he perdido todo, no tengo trabajo ni familia ni amigos… Pero saben qué, no pienso irme solo”, escribió en sus redes antes del ataque.
UNAM redobla esfuerzos de seguridad ante amenazas en redes
El caso ha provocado temor y movilizaciones en la UNAM, donde en semanas recientes se han recibido amenazas en redes sociales, generando evacuaciones en distintos planteles por seguridad preventiva.
El rector de la universidad, Leonardo Lomelí Vanegas, aseguró que se redoblarán esfuerzos para garantizar la seguridad física y emocional de la comunidad universitaria, en medio de una crisis marcada por violencia, discursos de odio y alertas constantes en centros educativos.