Internacional.- La Comisión Europea ha rechazado las acusaciones de censura tras el anuncio de Mark Zuckerberg, director ejecutivo de Meta, sobre el fin del programa de verificación de datos en plataformas como Facebook e Instagram.
En su intervención, Zuckerberg acusó a la Unión Europea de exceder los límites con su legislación sobre los servicios digitales, específicamente la Ley de Servicios Digitales (DSA, por sus siglas en inglés), que regula a las grandes plataformas en el territorio comunitario.
En una rueda de prensa, Paula Pinho, portavoz de la Comisión Europea, negó cualquier intento de censura.
“Rechazamos toda acusación de censura”, afirmó, aclarando que la DSA no obliga a las plataformas a retirar contenidos legales, sino que impone la obligación de actuar frente a contenidos ilegales o potencialmente dañinos, especialmente para menores de edad o procesos democráticos.
Thomas Regnier, portavoz comunitario de Soberanía Tecnológica, insistió en que las compañías que operan en la UE deben cumplir con la normativa vigente, subrayando que la DSA establece altos estándares éticos y exige la transparencia en los procesos de verificación. También remarcó que las plataformas deben presentar evaluaciones de riesgos si modifican sus medidas para mitigar la desinformación.
Regnier recordó que la legislación comunitaria no define qué contenidos son ilegales, sino que se basa en las leyes nacionales y el Derecho internacional. Además, la UE mantiene un expediente abierto contra Meta por su gestión de la desinformación en las elecciones al Parlamento Europeo de 2024, lo que sigue siendo motivo de preocupación para las autoridades de Bruselas.
