Ciudad de México.- Juan Soler se mantiene al centro de la controversia luego de expresar su apoyo a las políticas proteccionistas y antimigratorias del presidente Donald Trump, las cuales han derivado en la deportación masiva de indocumentados, cientos de miles de ellos, mexicanos.
Durante una participación en La Saga, canal de YouTube de la periodista Adel Micha, el actor argentino arremetió contra la ideología ‘woke’, a la cual acusó de imponer un discurso políticamente correcto que censura a quienes piensan diferente: “Últimamente, todo mundo está romantizando absolutamente todo: la delincuencia, la inmigración ilegal, el tema de esto, los trans, lo romantizan”, cuestionó.
Soler, también se dijo simpatizante de las políticas de los presidentes Javier Milei y Nayib Bukele, cuyas administraciones en Argentina y El Salvador, respectivamente, enfrenta duros cuestionamientos por la implementación de políticas contra grupos minoritarios y violatorias de derechos humanos.
A través de su cuenta en X, Juan Soler hizo una transmisión para defender su opinión y responderle a quienes le pedían volver a Argentina.
“Estoy hasta la madre de todos los que odian, de todos los que censuran y de los que cancelan. Tengo 34 años viviendo en México y vine porque yo estudié actuación en Argentina; amo la televisión. No salí huyendo de nada. Soy legalmente mexicano porque cumplí con todas las exigencias de la ley como el ciudadano responsable que soy… Resulta que decir la verdad es un delito”.
Su posicionamiento, como era previsible, avivó la controversia. Días después de transmitir su mensaje, una usuaria identificada como Cynthia Liliana Hernández creó una petición en la plataforma Change.org para exigir que autoridades mexicanas le revocaran la nacionalidad al actor argentino.
“Juan Soler ha mostrado una actitud despectiva ante los inmigrantes mexicanos y el gobierno de nuestro país. Su postura no respeta los valores de solidaridad y comprensión que caracterizan a México y sus ciudadanos”, se lee en la petición, la cual hace mención al Artículo 2 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que establece que cada ciudadano, sin importar su origen, debe respetar y dignificar la nación.