Jazmín Ramos
A raíz de la pandemia en Quintana Roo se tienen un rezago educativo de tres años, por lo que hay estudiantes de educación básica con una situación académica desafiante al grado que pueden llegar a la preparatoria sin saberse las tablas de multiplicar, consideró Luz del Carmen Flores, gerente de consultoría.Entrevistada luego de ofrecer una conferencia de prensa en donde dieron a conocer que el método Kumon es un esquema educativo basado en el aprendizaje personalizado de los alumnos, dijo que el sistema educativo en el país tiene áreas de oportunidad que deben atenderse de lo contario el rezago seguirá avanzando.
Comentó que los focos rojos en la educción van desde la falta de capacitación del recurso humano, hasta el tema de la evaluación y ejemplificó con el hecho de que ahora los alumnos no reprueban y pasan de grado sin tener los conocimientos, entonces llegan con deficiencias que se van sumando durante su proceso de enseñanza aprendizaje.
Además, señaló que otro factor que afecta el sistema de aprendizaje en el país, es la falta de compromiso de la mayoría de los padres, quienes no incentiva a sus hijos para desarrollar sus habilidades académicas, nos están pendientes de sus tareas y reclaman a los docentes el que no tengan éxito en la academia.
Dijo que estas nuevas generaciones de padres quieren inmediatez, cero compromiso con las tareas escolares y no colaboran con los hijos en sus tareas, pensando que la responsabilidad recae solo en los docentes, cuando es una labor compartida.
Ante ello, dijo que se han detectado alumnos con retrasos graves en su formación academia, pero tras iniciar este método de enseñanza-aprendizaje logran incluso superar el grado educativo en el que se encuentran y generan esa habilidad del autoaprendizaje.
Mencionó que, debido a las fallas del sistema educativo, así como el rezago que dejó la pandemia, provocó una alta demanda de padres que busca la regularización académica para sus hijos.