Viral.- Tras la alegría de la Nochebuena y la celebración navideña, muchos despertamos enfrentando las consecuencias de una noche de excesos. La resaca, o cruda, es una de las secuelas más comunes del consumo excesivo de alcohol durante estas festividades. Este conjunto de síntomas físicos, cognitivos y emocionales afecta a millones de personas, y aún falta el reto de sobrellevar el Año Nuevo.

¿Qué es la resaca?

La resaca se manifiesta con una serie de molestias que varían de una persona a otra, pero las más comunes incluyen: cansancio, debilidad, dolor de cabeza, náuseas, dolor muscular, sensibilidad a la luz y al ruido, y sed intensa. En algunos casos, también pueden aparecer síntomas como ansiedad, irritabilidad, vértigo y sudoración.

Factores que desencadenan la resaca

La resaca no es solo el resultado del consumo de alcohol en exceso. Diversos factores juegan un papel clave en su aparición y en la intensidad de los síntomas:

1. Deshidratación: El alcohol tiene un efecto diurético que provoca la pérdida de líquidos en el cuerpo.
2. Desequilibrio de electrolitos: El alcohol reduce los niveles de minerales esenciales, lo que afecta el funcionamiento del organismo.
3. Hipoglucemia: La bebida alcohólica disminuye los niveles de azúcar en sangre, lo que puede generar más malestar.
4. Inflamación gastrointestinal: El alcohol irrita el estómago y los intestinos, lo que puede causar malestar estomacal.
5. Alteración del sueño: Aunque el alcohol induce somnolencia, interfiere con la calidad del descanso, haciendo que el cuerpo no se recupere adecuadamente.

Además, los efectos varían según la cantidad y el tipo de alcohol consumido. Las bebidas oscuras, como whisky, brandy y vino tinto, contienen congéneres, que son sustancias químicas que irritan los vasos sanguíneos y el tejido cerebral, lo que agrava la resaca.

El sexo, la edad, el tipo de cuerpo y las diferencias biológicas también son factores determinantes en la intensidad de la resaca.

Remedios para aliviar la resaca

Aunque no existe una cura milagrosa, hay algunos remedios comunes que pueden ayudar a mitigar los síntomas:

• Hidratación: Beber sueros orales o bebidas isotónicas ayuda a reponer los electrolitos perdidos.
• Alimentos: Sopas como el menudo o la pancita, así como alimentos ricos en nutrientes, favorecen la recuperación del cuerpo.
• Analgésicos: Medicamentos como aspirina, ibuprofeno o naproxeno alivian el dolor de cabeza y muscular.
• Café o bebidas endulzadas: Aunque no eliminan la resaca, pueden mejorar el estado de alerta.

Es importante tener en cuenta que algunos remedios populares, como “una cerveza fría por la mañana” o “un gin-tonic”, solo prolongan los efectos del alcohol en el organismo y no representan una solución efectiva.

Cómo prevenir la resaca

La mejor forma de evitar la resaca es beber con moderación. Sin embargo, algunos consejos adicionales pueden ayudar a minimizar sus efectos:

• Evitar bebidas con congéneres: Optar por licores claros como vodka, ginebra o ron puede reducir el riesgo de sufrir una resaca más fuerte.
• Comer antes de beber: Una comida balanceada ralentiza la absorción del alcohol, reduciendo su impacto.
• Hidratarse: Beber agua entre tragos combate la deshidratación y alivia los efectos del alcohol.
• Dormir lo suficiente: Un buen descanso es crucial para que el cuerpo se recupere.

En estas fiestas, es importante recordar que la moderación es clave, y aunque la resaca puede ser inevitable, con algunos cuidados podemos disminuir su impacto y disfrutar con más energía del Año Nuevo.