Entretenimiento.- Una controversia ha estallado entre el personal médico y las estilistas tras la celebración de una ceremonia de “paso de luz” por parte de una escuela de cosmetología. Esta práctica, tradicionalmente reservada para los graduados de Enfermería, ha provocado críticas de enfermeras que consideran que su simbolismo histórico se ve desvirtuado.
La ceremonia, conocida como “ceremonia de lashistas”, consistió en que las capacitadoras encendieron velas para conmemorar a las alumnas que finalizaron su curso. Todas las participantes vestían trajes quirúrgicos en color morado y al finalizar recibieron una bata blanca, un gesto que ha enfurecido a muchos profesionales de la salud.
La ceremonia de paso de luz es un ritual simbólico que marca la transición de los estudiantes de enfermería a la práctica profesional. Este acto, que incluye encender velas o lámparas, simboliza la luz del conocimiento, la esperanza y la dedicación que llevarán a su futura labor. La tradición se remonta a Florence Nightingale, considerada la fundadora de la enfermería moderna, quien utilizaba una lámpara para iluminar el camino en los hospitales durante la guerra de Crimea.
Las enfermeras han manifestado su descontento, argumentando que las lashistas y manicuristas no deberían compararse con los graduados de Enfermería, una profesión que implica una formación rigurosa y el cuidado de la salud. Comentarios en redes sociales reflejan esta polarización:
“Ya cualquiera le puede faltar el respeto a los profesionales de salud”, “Los cursos de lashista son de meses, mientras que la formación médica requiere años”, y “Aparte, les dan su bata blanca al final como si hubieran estudiado seis o siete años”.
Por otro lado, defensores de las estilistas argumentan que también tienen derecho a celebrar su trabajo, que, aunque diferente, también implica un nivel de habilidad y cuidado. “Déjenlas en paz, sólo quieren cuidar a su gente”, afirman algunos, resaltando la importancia de su oficio en el bienestar estético de sus clientes.
Esta discusión ha provocado muchos memes que evidenciando las tensiones entre diferentes profesiones del cuidado y la estética. Mientras las estilistas continúan defendiendo su ceremonia, el personal médico reclama el respeto y la diferenciación que su profesión merece. Esta situación plantea una reflexión sobre el valor y reconocimiento de cada oficio en nuestra sociedad.