REDACCIÓN / GRUPO CANTÓN

Madrid – Vinícius Tobias, lateral derecho brasileño de 20 años actualmente a préstamo en el Shakhtar, ha vivido un giro inesperado en su vida personal. A principios de año, el futbolista anunció con alegría en sus redes sociales que iba a ser padre, incluso llegando al punto de tatuarse el nombre de su futura hija, “Maite”.

El anuncio fue recibido con entusiasmo tanto por sus seguidores como por el propio jugador, quien compartió su ilusión de convertirse en padre junto a su expareja, Ingrid Lima. Sin embargo, la historia tomó un rumbo trágico cuando, días antes del nacimiento de la niña, se reveló que Vinícius no era el padre biológico.

Ingrid Lima, influencer y expareja del futbolista, compartió la dolorosa noticia a través de sus redes sociales, explicando que una prueba de ADN determinó que Vinícius no tenía la paternidad de la pequeña. “Como ya todo el mundo sabe, Vinícius y yo hace tiempo que no estamos juntos, y durante estas idas y vueltas tuve una relación con alguien. Decidimos hacer un examen de ADN y Maite no es hija de Vinicius”, declaró.

A pesar del impacto de la revelación, Vinícius ha mostrado una notable madurez y responsabilidad. Según Ingrid, el futbolista se comprometió a proporcionarle 2,000 euros mensuales para ayudar a cubrir los gastos de la bebé, asegurando así su bienestar. “Yo pedí a Vinicius no estar en el parto y que tampoco publicara algo relacionado hasta que se hiciera el examen. Lo hablamos amistosamente, le expliqué lo sucedido y a él le deseo lo mejor del mundo”, añadió Lima.

Este episodio, aunque doloroso, resalta no solo los retos personales que enfrenta Vinícius, sino también su compromiso hacia la futura niña, demostrando que, a pesar de las circunstancias, el bienestar del niño siempre debe prevalecer. La situación deja una lección sobre la importancia de la comunicación y la responsabilidad, incluso en medio de la desilusión.